Las asignaturas pendientes del recinto ferial de Córdoba

Cuando en 1994 se celebraba por primera vez la Feria de Nuestra Señora de la Salud en el recinto de El Arenal, los cordobeses mantenían la esperanza de que las condiciones del nuevo espacio que venía a sustituir al paseo de la Victoria iba a mejorar con el paso del tiempo.

No sólo los caseteros han reclamado actuaciones para dotar el recinto de las condiciones necesarias, sino que también era motivo de queja de quienes cada año a final de mayo disfrutaban de la Feria de la Salud. Entre otras cuestiones, si hacía calor echaban en falta más sombras y si llovía, los charcos hacía presencia para demostrar que el camino más corto entre dos puntos es dar un largo rodeo para no mojarse.

Las últimas intervenciones

Desde el anterior mandato municipal se han desarrollado diversas actuaciones, quizás las más importantes acometidas en las tres décadas de existencia del recinto ferial. En 2022 se pudo disfrutar por primera vez una calle del Potro que dejaba atrás el aspecto de trasera de las casetas y las atracciones. Se pavimentó, se dotó de unos bancos, se protegió con una valla y se plantaron árboles.

En la Feria de la Salud de 2024 se estrenó -aunque no fuera visible- un nuevo sistema de alcantarillado, con una red de más de 1.200 metros cuadrados de tuberías para canalizar las aguas pluviales y evitar los charcos.

Hace escasos días, el gobierno municipal anunciaba un nuevo paquete de actuaciones. En este caso, está a punto de licitarse la plantación de 174 nuevos árboles de especies variadas para generar la tan necesaria sombra y, por otro lado, se crearán unos caminos peatonales hormigonados de tres metros de ancho que servirán no sólo para los días de Feria sino también para el resto del año, sobre todo para las jornadas en las que el Córdoba CF juega en el estadio El Arcángel y los charcos dificultan el acceso de los aficionados desde el aparcamiento.

El último acuerdo

Pero, como se decía, queda mucho por hacer. Esta semana se ha vuelto a reunir la Comisión de Feria y entre los acuerdos adoptados figura el descartar la consulta popular para decidir sobre el modelo de Feria y avanzar en el denominado modelo de cota cero; es decir, suministrar a las casetas la conexión a la luz, agua y saneamiento desde el suelo de la misma, lo que abarataría los costes de instalación.

Al término de la reunión, el delegado de Fiestas y Tradiciones, Julián Urbano, mostraba su satisfacción por "el consenso alcanzado que refleja el compromiso de todos los miembros de la Comisión por lograr una gran Feria de Nuestra Señora de la Salud, a la vez que demuestra el compromiso del gobierno local por intentar abaratar los costes que afrontan los caseteros«, además de que «este acuerdo se ha alcanzado tras meses de diálogo e intercambio de ideas para acercar posturas y lograr este consenso”.

Lo que falta, según el CMC

Desde el Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC), su presidente, Juan Andrés de Gracia, apunta que más que un avance ha sido «una vuelta a la situación anterior», en la que, como ya se ha había aprobado, la apuesta era por la máxima permanencia de las casetas en el recinto con las conexiones a cota cero «y a partir de ahí va veremos adonde se puede llegar».

La Comisión de la Feria agrupa no sólo a técnicos municipales, sino también a representantes de los colectivos que instalan casetas en El Arenal. Pero desde el CMC se indica que aún quedan aspectos fundamentales en los que no hay ese consenso. De Gracia comenta que uno de ellos es el de las inversiones previstas, «que una vez más se retrasan en el tiempo y el ferial va a seguir sin esa inversión necesaria en elementos esenciales para cualquiera que va a visitarlo, como las sombras, la accesibilidad, que sea un lugar más interesante para el caballo, que haya acerados».

El Movimiento Ciudadano no pierde de vista que «la Feria sigue estando falta de muchas cuestiones». Una de las que resalta su presidente es que esta celebración sigue de forma provisional en El Arenal y recuerda que «en el dictamen que hicimos en su tiempo el primer punto era tener la seguridad de que la Feria va a seguir ahí».

Sobre este aspecto, señala que «ahora, con un PGOM de por medio y una entidad que lleva el Córdoba CF con unos proyectos que no sabemos cuáles son y que pueden afectar al ferial, el problema es saber si va a seguir ahí y por cuanto tiempo». Esta provisionalidad se puso de manifiesto cuando se barajó el proyecto de convertir El Arenal en una ciudad del ocio y trasladar la Feria al otro lado de la autovía.

Respecto al modelo de casetas también queda mucho por hacer, según el CMC. Su presidente expone que «todavía las bases dicen que las casetas las pueden pedir las entidades sociales, instituciones, etcétera y se permite que cuando alguien no puede con su personal puede contratar un servicio de hostelería, camareros y demás».

De Gracia contrasta esto con la realidad y afirma que «esto está permitido y es legal pero a estas alturas sabemos que es falso, que hay diez restaurantes que se cuelan a través de asociaciones teóricas y que no hay tres o cuatro, sino 30 casetas jóvenes que son de negocios de la noche, fundamentalmente».

Como conclusión, el máximo representante del Consejo del Movimiento Ciudadano destaca lo que queda por hacer y que «si ésta es la realidad, hagámosla visible». La solución que propone es «hacer una bases a través de una ordenanza que recree la nueva realidad de la Feria de Córdoba». Mientras tanto, añade, «seguimos aprobando unas bases que son falsas y son inútiles para ordenar el recinto».