La vivienda en propiedad ¿es o puede convertirse en un problema para la economía?
En España el 76% de la población es propietaria de una o más viviendas, eso quiere decir que una enorme capa de población española es propietaria, lo que debería ser un dato positivo y para algunos de los lectores un dato sin apenas relevancia económica para nuestra economía, pero no, el mercado de la vivienda en nuestra economía es muy importante y las consecuencias de ese dato, en el momento actual de recesión económica en el que nos encontramos, van mucho más allá de lo que nos podemos imaginar. ¿Qué tipo de consecuencias pueden darse? ¿Qué puede haber de negativo en una economía en la que el porcentaje de vivienda en propiedad es tan elevado? Veámoslo.
Como decía, el elevado numero de propietarios de vivienda trae como consecuencia en general reducciones de la movilidad geográfica a la hora de la búsqueda de empleo por parte de los ciudadanos. El INE en uno de sus informes sobre movilidad geográfica en 2022 recalca los siguientes datos;
En términos absolutos, 481.100 de los 20.084.700 ocupados en el primer trimestre de 2022 han residido en su municipio actual menos de un año. Por su parte, hay 16.774.200 ocupados (el 83,5% del total) que llevan cinco o más años en el mismo municipio. Casi tres de cada 10 ocupados (el 29,8%) no ha cambiado de municipio de residencia desde su nacimiento. El 40,8% ha cambiado de municipio dentro de la misma provincia, el 4,1% procedía de otra provincia de la misma comunidad autónoma, el 13,5% de otra comunidad y el 11,9% de otro país.
Estos datos ofrecidos por el INE referentes al primer trimestre de 2022 en materia de movilidad geográfica dejan palpable que, en general los españoles tenemos un índice muy bajo de movilidad geográfica y un factor que explica este fenómeno es la vivienda. En los momentos en los que la economía atraviesa una recesión sumada al alto número de ciudadanos que son propietarios de vivienda esto dificulta la correcta reasignación de recursos en la propia economía, ya que, debido a este hecho, la escasa movilidad no propicia el dinamismo que precisa la economía en los momentos de crisis. Para que lo entienda el lector; Si una persona tiene una hipoteca en Córdoba difícilmente aceptará una oferta de trabajo en Almería, o como mínimo supondrá una barrera inicial a la hora de tomar la decisión y los datos del INE así lo reflejan y el siguiente dato más todavía que es qué; el 83,5% de los asalariados llevan más de 5 o más años en el mismo lugar de residencia.
En una economía como la española que no es lo dinámica que debería y podría ser, donde el tejido empresarial no está compuesto por robustas multinacionales, donde la productividad empresarial está estancada desde hace décadas, donde la fiscalidad a la inversión y al ahorro son infernales y todo ello sumado a la escasa movilidad geográfica debido a factores como el de la vivienda… Hace que las crisis económicas que hemos atravesado sean más profundas y duraderas.
Por lo tanto, es cierto que actualmente una tasa de propietarios tan elevada en momentos cruciales de una economía, en concreto de la española, pueden representar problemas a la hora de las reasignaciones de recursos y capital para dinamizar el entramado económico, y que si se diesen, servirían para aumentar de forma exponencial la productividad y abandonar de forma más eficaz y eficiente la espiral de recesión económica que atravesamos en nuestra economía.
