El Ayuntamiento de Montoro contrata dos halcones para espantar las palomas
El Consistorio considera que «es uno de los métodos más antiguos, eficaces, naturales y ecológicos"
Las palomas molestan en Montoro. Y todos aquellos sitios que deciden colonizas. En el caso de esta localidad cordobesa se ha advertido en los últimos meses una proliferación de la denominada paloma bravía y han decidido ponerle solución a este problema con la contratación de dos halcones para espantarlas del casco urbano.
En concreto, el Ayuntamiento de Montoro ha contratado por 4.132 euros, sin IVA, al cetrero José Sánchez Aguilar para que durante el plazo de dos meses se encargue de hacer que descienda el número de palomas en el pueblo, y a la vez se reduzcan las molestias que estas aves ocasionan no sólo a los vecinos, sino también a los espacios públicos y a los edificios.
Vuelos tres días en semana
La dinámica es la siguiente: En primer lugar se va a inspeccionar el pueblo para determinar las zonas en las que se va a actuar, así como la frecuencia con la que se van a realizar los vuelos de los halcones. Desde el Ayuntamiento se estima que el 'tratamiento' sería eficaz con una aplicación sólo los lunes, miércoles. y viernes durante dos meses.
En el informe municipal se explica que «una vez que las palomas se sientan amenazadas por la presencia de sus depredadores naturales y comiencen a 'catalogar' esa zona como de no segura, migrarán«, por lo que »una vez desplazada del todo, será necesario continuar con algún vuelo de recuerdo para que no vuelvan a aparecer en esa zona que se espaciará en el tiempo».
Esta técnica de los vuelos se complementa con otra consistente en la colocación de los halcones en dos puntos elevados de la población, como son el campanario de la iglesia del Carmen y el edificio del Banco Santander en la plaza Hijas de la Caridad.
Un método antiguo y eficaz
El Ayuntamiento de Montoro no lo ha tenido fácil a la hora de buscar quien le preste este servicio, ya que es novedoso y aún no hay muchas empresas que se dediquen a espantar palomas, algo usado hasta ahora en los aeropuertos y en algún estadio de fútbol.
Las razones por las que el Consistorio montoreño se ha decantado por esta técnica de la cetrería con halcones se debe a que «es uno de los métodos más antiguos, eficaces, naturales y ecológicos para controlar la superpoblación de palomas», porque «cuando las palomas detectan la presencia de halcones u otras rapaces en su zona de posamiento y anidación, inmediantamente comienzan a considerar dicha zona como de riesgo y emprende la migración a otras zonas más seguras».