Homenaje a Ryan, el joven que murió en Getafe por sobredosis
Todo lo que se sabe de la muerte del joven de 14 años por sobredosis de cocaína rosa en Getafe
La Policía Nacional ha abierto una investigación sin descartar ninguna hipótesis para tratar de esclarecer de quién era la sustancia
El viernes pasado un joven de 14 años moría en Getafe por ingerir una bebida energética a la que le echó dos gramos de tusi, una droga conocida como la cocaína rosa que lleva ketamina y éxtasis. Ryan había quedado con unos amigos para pasar la noche, horas más tarde sus padres recibían una llamada de la Policía Nacional informándoles de que su hijo había entrado en parada cardiorrespiratoria y había fallecido.
Según fuentes policiales, el chico no ingirió la cantidad total de la droga. Por el momento, no se ha determinado la dosis exacta que entró a su organismo, puesto que todavía no ha salido el resultado del análisis toxicológico.
La Policía Nacional ha abierto una investigación sin descartar ninguna hipótesis para tratar de esclarecer de quién era la sustancia estupefaciente y si el menor la ingirió por su propia voluntad.
La noche del viernes, Ryan quedó con dos amigos y otros jóvenes que habían conocido a través de Instagram. Sobre las 23:00 horas, en los alrededores de la estación de Metro de Los Espartales, el menor perdió el conocimiento y cayó al suelo.
Las primeras hipótesis barajan que los jóvenes que conocieron a través de la red social fueron quienes llevaron la cocaína rosa. Estos al ver que Ryan perdía el conocimiento huyeron por el Metro.
Cocaína rosa
Uno de los amigos del joven de 14 años ha indicado en una entrevista en Más Vale Tarde que avisó a su madre para que recobrase el conocimiento. Además, ha añadido que tenía la mirada perdida y que le llevaron a un banco para ver si volvía en sí.
Al lugar del suceso acudieron Policía Nacional y sanitarios que no pudieron hacer nada por salvarle la vida. El Summa 112 ha confirmado que el adolescente sufrió una parada cardiorrespiratoria.
Los amigos han confesado que el joven consumió drogas por probarlas por primera vez. En este sentido, han señalado que el chico sufría problemas cardíacos, un factor que pudo agravar su muerte.
Los padres de Ryan han apuntado que los agentes de la Policía Nacional les informaron en un primer momento que estaban investigando la muerte de su hijo al tratarse de un homicidio. El cuerpo de seguridad ha negado esta afirmación por parte de la familia.
Un agente de la Policía Nacional inspecciona el contenido de una maleta que contiene cocaína rosa
Los tutores también han comentado que esa misma noche vieron un vídeo en redes sociales de los jóvenes que habían estado con él donde se mofaban de un menor al que le habían echado droga en una bebida.
Asimismo, relatan que el menor no consumió drogas de manera voluntaria. Los amigos de Ryan se postulan en este sentido al señalar que el chico «no era drogadicto» y que «nunca se había metido cocaína, ni porros».
En un primer momento se informó de que al chico le habían drogado, pero horas más tarde la policía lo desmintió de nuevo ya que no recibieron ninguna denuncia o diligencia al respecto. Sus amigos han llenado Tiktok de vídeos homenaje porque era una persona muy querida entre los suyos.
El chico fue enterrado este domingo y sus familiares y gente más cercana le han honrado en un emotivo homenaje cerca de la estación del Metro donde ocurrió la tragedia. En este lugar se pueden ver globos, velas y mensajes de despedida.
Imagen de varios consumidores de estupefacientes
El tusi, la droga de moda
La llaman cocaína rosa, pero lo único cierto de su nombre es el color. Es mezcla de sustancias de ketamina, éxtasis y otras sustancias psicoestimulantes, tiene un componente psicodélico.
«La cocaína rosa es un buen ejemplo de lo que a menudo sucede con las drogas que se venden en el mercado negro: quienes la adquieren nunca pueden saber con seguridad qué es lo que están consumiendo, ya que la adulteración y la contaminación de estas sustancias están a la orden del día» explica el profesor de Farmacología, Luis Felipe Callado, de la Universidad del País Vasco.
El Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones (OEDA) reveló en su informe anual del pasado 2022 que el 2,1 % de estudiantes de la ESO de entre catorce y dieciocho consumen cocaína.
Entre las drogas que más incauta la policía en nuestro país destaca la cocaína, hachís, heroína y éxtasis; así se detalla en el Informe de alcohol, tabaco y drogas ilegales en 2023. En la última década el número de consumidores de droga a nivel mundial ha aumentado un 23 %.
