Cinco vinos blancos para volver de las vacaciones con mejor sabor de boca

El final del verano trae consigo la vuelta a la rutina, pero también ofrece una excusa perfecta para reunir a amigos y familiares y revivir los momentos de relax y diversión de las vacaciones.

¿Y qué mejor manera de hacerlo que con una buena copa de vino en la mano? El vino no solo es una bebida, sino un catalizador para la conversación, una excusa para pausar y conectar, y una forma de prolongar un poco más esa sensación de vacaciones.

Los vinos blancos ligeros y frescos son ideales para empezar la temporada posvacacional. Después de los calurosos días de verano, estas opciones refrescantes invitan a socializar de manera relajada. Su acidez vibrante o su dulzor a medias despiertan los sentidos, ofreciendo una transición suave de los días de playa a las reuniones en la terraza.

Imagina una tarde de septiembre, el sol aún cálido y una suave brisa que anticipa el otoño. Una copa de vino puede ser el pretexto perfecto para una charla amena con amigos, compartiendo anécdotas de las vacaciones mientras el sol se pone.

La bodega berciana Dominio de Tares, de la Denominación de Origen Bierzo, ha incorporado a su oferta el Cepas Viejas Godello 2023, un vino de Villa de Bembibre, que refleja el carácter, altitud y pendientes del Bierzo Alto. Este Godello, que la bodega lleva varios años desarrollando, sale a la luz con la responsabilidad de seguir la estela de su hermano tinto y situarse entre los grandes vinos blancos, al igual que ya ocurriera hace 25 años con su emblemático Cepas Viejas Mencía.

La bodega incorpora este blanco a su reputada gama Cepas Viejas y lo elabora con viñas muy singulares procedentes del Bierzo Alto, zona con gran historia por la que transcurrió durante siglos la antigua «Vía Nova» Romana, ruta de paso entre Astúrica Augusta (Astorga) y Bracara Augusta (Braga), de enorme tradición vitícola.

En el caso del Viore Verdejo sobre lías es un monovarietal de la denominación de origen Rueda. Este delicioso vino blanco es capaz de transportarnos a Los Tordos, un pequeño viñedo plantado a 700 metros de altitud en una ladera coronada por hierbas aromáticas y pinos, matices que casi podremos apreciar en la copa.

En Los Tordos, el equipo de Bodegas Viore eligió unas pocas hileras de cepas con un carácter distintivo. Las uvas de este lugar escogido son las únicas con las que se elabora este vino, lo que hacer que se produzca una limitación natural en su producción.

En esta vuelta al trabajo o a las rutinas que nos ocupan no está de más volver a ver el mar y dejarse de nuevo perder en los recuerdos de la playa. Mar de Frades y Pedro del Hierro celebran la moda con una nueva edición limitada de su icónica botella. El vínculo entre Mar de Frades y el mundo de la moda alcanza su duodécimo año junto a una de las firmas españolas más reconocidas, Pedro del Hierro, continuando una década de expresión y creatividad de la mano de los diseñadores más destacados del país. Este lanzamiento especial, que conmemora el 50 aniversario de la firma, fusiona el arte del vino y las creaciones de moda en una botella de diseño único que quiere capturar la esencia de la costa y el cielo.

De cara a la búsqueda de los nuevos consumidores y una vuelta sin alcohol, la innovación llega de la mano de otro vino gallego. Marieta Sin es un vino desalcoholizado procedente de uva albariño, convirtiéndose en la versión más versátil y moderna del universo Marieta de las Bodegas Martín Codax. Un vino blanco sin alcohol, desafiante, innovador y refrescante.

Marieta Sin te invita a disfrutar, sin límites y en cualquier momento, de todo el sabor y la personalidad de Marieta. De naturaleza curiosa, no tiene complejos, le gusta explorar y probar cosas nuevas. Una alternativa para que nunca te prives de disfrutar del momento.

Por su parte, el vino Homenaje Blanco Roto de Bodegas Marco Real es un vino también de baja graduación que está elaborado de forma natural por parada de fermentación en frío. Esto provoca que los azúcares se mantengan, nos dé esos matices de dulzor, y a la vez la acidez natural no se pierda, lo que lo hace también refrescante y para tomar frío.

Es un vino delicado, afrutado y floral. Después de una vendimia seleccionada de las variedades Moscatel y Syrah, se realiza una breve maceración a la que sigue una fermentación alcohólica en depósitos de acero inoxidable y a temperatura controlada.

La vuelta a la rutina no tiene por qué ser un abrupto retorno a la realidad. Con los vinos adecuados, podemos hacer que la transición sea suave y placentera, transformando esos momentos de reincorporación en nuevas oportunidades para socializar y disfrutar.

Así que, en lugar de lamentar el fin del verano, celebremos el inicio de una nueva etapa con una copa de vino en la mano, rodeados de amigos y buenas conversaciones. Porque al final, el vino es una forma de vida, un catalizador de experiencias y, sin duda, un compañero fiel en cualquier reencuentro.