Conversaciones en Familia
Paula Camarós: «El parto es la cita a ciegas más importante de tu vida»
La matrona y escritora acaba de publicar su primer libro, El poder de crear vida, un repaso a conciencia del embarazo, el parto y el postparto
El poder de crear vida es el nombre que Paula Camarós le ha puesto a su primer y recién publicado libro. La matrona y CEO de Baby Suite trasladan la realidad del embarazo, el parto y el postparto con un lenguaje sencillo a la vez que científicamente riguroso.
A través de su cuenta de Instagram, en la que acumula más de 200 mil seguidores, y de YouTube, con más de 600 mil suscriptores, esta matrona y madre de dos hijos traslada de una manera desenfadada todo lo que sabe sobre el embarazo, después de haber trabajado durante seis años en el sistema sanitario británico y haber abierto en 2017 su propio centro de maternidad en Madrid, Baby Suite.
–Los últimos estudios han demostrado que cuanto más medicalizado está el parto y más proceso médico se hace sobre él, más complicaciones se derivan o más cesáreas se tiende a realizar. ¿Por qué sucede esto?
–En los últimos 20 años, los porcentajes de intervenciones se han disparado, sobre todo en países superdesarrollados, como puede ser España, Estados Unidos; en los que se está medicalizando un proceso que es natural, un proceso fisiológico normal del cuerpo de la mujer. Por supuesto que habrá mujeres que parten de un embarazo con una enfermedad ya preexistente y necesitarán un seguimiento más estrecho. Pero cuando tratamos a toda mujer embarazada como una mujer enferma, todo lo que le llega es miedo, sufrimiento, dolor, sumado a que cada vez se medicalizan más procesos fisiológicos. Se están disparando tanto las cesáreas, las episiotomías, como los partos instrumentalizados, que pueden tener repercusiones muy negativas, ya no solamente en la mamá sino en el bebé. Está demostrado que a mayor medicalización, mayor morbimortalidad.
–En su libro y en Instagram se declara defensora del parto fisiológico y natural. ¿Cuáles son sus características?
–Soy una defensora del proceso humanizado. No pretendo idealizar un tipo de parto concreto, porque lo que para mí puede ser un parto humanizado y respetado, para otra mujer quizás no lo sea. Promuevo y defiendo el proceso fisiológico, que en ocasiones no puede ser posible porque una cesárea o una inducción estén médicamente indicadas o una episiotomía sea necesaria para garantizar la salud materno-fetal. A lo mejor una mujer que ha tenido una cesárea tiene una experiencia del proceso maravillosa porque ha ido acompañada de su pareja, porque se le ha humanizado, se ha ido explicando, se le ha permitido coger al bebé por primera vez. A lo mejor, si es sorda ha podido entrar con su audífono. Esto no es una cirugía común, no nos van a quitar un trozo del intestino. Es la cita a ciegas más importante de tu vida. Es un momento mágico y una mujer que no ve bien o que no escucha bien, que se le quite lo que la está ayudando, no es respetar o humanizar un proceso.
Durante el embarazo hay que comer para dos, no por dos
–¿Cuáles son los falsos mitos o creencias infundadas más difundidas sobre el embarazo?
–He llegado a oír que estando embarazada no puedes cruzar las piernas porque puedes tener una pérdida gestacional. Mujeres que siguen pensando que durante el embarazo hay que comer por dos, cuando tienes que comer para dos. Hay que priorizar en vitaminas y minerales, en comidas nutricionalmente buenas para la madre y para el hijo. Hay también quien sigue pensando que no se puede hacer deporte o tener relaciones sexuales, algo que de hecho puede resultar incluso recomendable y beneficioso, siempre y cuando no exista una contraindicación médica. Hay mujeres que siguen pensando que deben ir rasuradas al parto, porque así el vello hace que la vagina esté más limpia. El pelo no molesta en absoluto. Y de hecho, si un profesional de la salud te rasura o te pone un enema, es violencia obstétrica. La mujer que quiera rasurarse porque ella está más cómoda que lo haga, pero no es una condición sine qua non para parir. La vagina no es un lugar aséptico ni estéril. Conviven un montón de bacterias buenas para nuestra flora vaginal.
–¿Cuáles son ese tipo de errores más comunes que se pueden evitar fácilmente, como comer para dos y no por dos?
–Por desgracia, son tres los que más se llevan a cabo. El primero, los malos hábitos. Hay muchas mujeres que son fumadoras y que en el embarazo siguen fumando. Lo ideal, por supuesto, es nada de tabaco. Pero con el alcohol, por ejemplo, no existe cantidad mínima permitida como segura. Al igual que con la lactancia, cuando se metaboliza en menor medida, en el embarazo esta cantidad de alcohol atraviesa la barrera placentaria y el bebé recibe el 100 % de la ingesta de alcohol. Muchos niños que nacen de madres drogodependientes o que consumen alcohol o tabaco durante el embarazo, tienen lo que llamamos coloquialmente el mono, el síndrome de abstinencia. El ejercicio, en cambio, es muy recomendado. Si nunca has realizado un deporte, el embarazo no es el momento ideal para empezar. Quizá haya que hacer algunas modificaciones, como cambiar la bici normal por una estática y reducir el riesgo de caídas, pero en general es muy beneficioso.
No somos pacientes, no estamos enfermas, estamos embarazadas
Y, por último, llevar el embarazo por dos vías, por lo público y lo privado. Es muy emocionante tener ecografías extras, escuchar al bebé dos veces, pero a medida que la gestación va avanzando, se realizan cada vez más pruebas y dejan de ser solamente ecografías y comienzan a hacerse más analíticas: la curva del azúcar, el aspirado vaginal y anal; a las que la mujer se tiene que exponer dos veces, pero también se obtienen resultados discordantes. Para lo que un médico puede estar perfecto, para otro puede no cuadrar. Al final la mujer se encuentra en un peregrinaje de especialistas que no la dejan vivir el proceso. Nos olvidamos que es una etapa más de la salud reproductiva de la mujer. No somos pacientes, no estamos enfermas, estamos embarazadas.
–¿Cuáles son las claves fundamentales para una buena preparación al parto?
–La mejor de todas va innata en la mujer. Ella sabe hacerlo y no hace falta más. Nacemos con ello. Es verdad que el empoderamiento que se ofrece en la preparación al parto es lo que hace posible llegar a él con calma, con el conocimiento necesario para saber tomar las decisiones oportunas, para entender que a veces la normalidad se desvía y hay que tomar otro camino, para entender que las emergencias también existen. En definitiva, para comprender el proceso y mantener la calma.