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Tres niñas bailando

Tres niñas bailandoPexels

Estos son los curiosos beneficios de cantar y bailar en el desarrollo de los niños

El canto y el baile se consideran dos de los mejores vehículos para ayudar a los más peques a relacionarse con el mundo que los rodea, y pueden convertirse en sus actividades extraescolares favoritas

La música es un elemento indispensable en nuestras vidas. Cada día, nos acompañan canciones y melodías que hacen nuestra rutina más llevadera. Es ese medio de expresión universal que tiene tantos efectos positivos en los seres humanos, especialmente en los más pequeños. Durante nuestros primeros pasos en la vida, la música juega un papel fundamental ya que ayuda a nuestro desarrollo cognitivo, social, emocional y del lenguaje.

El canto y el baile se consideran dos de los mejores vehículos para ayudar a los más peques a relacionarse con el mundo que los rodea, y pueden convertirse en sus actividades extraescolares favoritas.

Niños en un coro

Niños en un coro

Según Isabel Bermúdez Hernández, psicóloga infanto-juvenil y familiar, y divulgadora de psicología en @psicoup_psicología: «A nivel psicológico se ha descubierto que bailar estimula diferentes áreas del cerebro, y un cerebro como el de los niños que está en pleno desarrollo se va a beneficiar de todos estos estímulos».

Además de divertirse y aprender música desde bien pequeños, tendrán un mayor control del cuerpo y de la voz, mejor equilibrio, mayor armonía y capacidad de concentración y otros muchos beneficios.

¿Qué habilidades desarrollarán?

  • Esfuerzo y tolerancia a la frustración: tendrán que practicar para aprender.
  • Ayuda a superar la timidez: tienen que interactuar con sus compañeros, lo que les ayudará a hacer nuevos amigos y ganar autoestima.
  • Potenciar el resto de habilidades: ayuda a estimular el cerebro, por tanto, los beneficios son generales y les serán de utilidad en otras tareas.
  • Experimentar con sonidos: la música se caracteriza por la combinación de sonidos, experimentar con ellos y asociarlos. Realizar juegos sonoros favorecerá a un desarrollo mental muy importante.
  • Mejor estado de ánimo: gracias a las hormonas que se activan, tendrán mejor humor y se sentirán realizados.
  • Mejor capacidad de atención y concentración: en la era de las pantallas, desarrollar este tipo de habilidades es crucial para el progreso intelectual de los pequeños.
  • Coordinación y actividad psicomotora: con el baile aprenderán a coordinar sus movimientos y con el canto a compenetrarse con sus compañeros y cantar en armonía juntos.
  • Aumento de la creatividad e imaginación: inventan coreografías y nuevas canciones, tienen que memorizarlas y luego interpretarlas.

Tocar un instrumento musical

Empezar con el canto y el baile desde bien temprano puede estimular la curiosidad sobre tocar algún instrumento. Es el culmen de la música. Además, el orgullo de un padre o madre al ver a su hijo tocando el piano, la guitarra o el violín es incomparable.

De todas maneras, hay que ir poco a poco. Si se le exige mucho a los más peques puede ser contraproducente y que pierdan toda la motivación y gusto por la música. «Esto puede volverse en contra, cuando los niveles de exigencia puedan ser altos, provocando el efecto contrario», cuenta el profesor de piano Jordi Jauset.

Niños tocando el piano

Niños tocando el piano

«El mismo niño se inclinará por profundizar en el estudio del instrumento». Tiene que sentirse libre de elegir qué es lo que más le gusta y seguir desarrollando las tantas habilidades que aporta la música en los niños.

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