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Del exclusivo menú al sencillo vestido de novia: todo lo que sabemos de la boda de El Litri y Casilda Ybarra
Civil, íntimo y familiar, el enlace se celebrará en el Cortijo Carrascalejo, propiedad del novio
Es una de las bodas del año. Miguel Báez `El Litri´ y su pareja Casilda Ybarra se darán el «Sí, quiero» el próximo 14 de mayo en Sevilla, despertando interés y expectación en toda la crónica social. A pesar de que la discreción es algo que caracteriza a los novios, son muchos los detalles que se conocen del enlace. En primer lugar, que será civil, ya que el torero aún no posee la nulidad eclesiástica de su matrimonio con Carolina Herrera, de quien se separó hace cuatro años después de trece de convivencia y tres hijos en común.
La intención al principio era celebrar una ceremonia religiosa oficiada por Ignacio Sánchez-Dalp, íntimo del torero. Sin embargo, hasta que puedan realizarla, se han decidido por una sencilla misa que siga a la firma de los documentos civiles oficiales que les convierta en marido y mujer. Se trata, por tanto, del segundo enlace para el torero, pero el primero para su futura esposa, que tuvo una relación larga que terminó antes de pasar por el altar o tener hijos.
A diferencia de la que celebraron Miguel y Carolina en 2004, en su finca de Los Guateles, en Cáceres, que contó con 600 invitados, esta será bastante más reducida y solo asistirán las familias y amigos más directos, alrededor de 260 personas. Por supuesto, estarán presentes los hijos del torero, Olivia, Miguel y Atalanta, que ya acudieron a la petición de mano en la que su padre se declaró oficialmente a Casilda. La relación de esta con los hijos de su pareja es presumiblemente buena, por lo que se espera que sea realmente emotivo que estén todos junto al altar.
Entre los invitados más destacados, no faltará Fran Rivera o Adriana Torres, pareja de Mario Conde. Quien, al parecer sí ha declinado la invitación es Enrique Ponce. A pesar de ser íntimo del novio, desea evitar la aparición en público con Ana Soria.
Tras la ceremonia, se llevará a cabo el convite en un lugar de excepción, el Cortijo Carrascalejo, situado en Sanlúcar la Mayor, a pocos kilómetros de Sevilla. Propiedad de la familia Báez Spínola, la finca está gestionada por El Litri y se ha convertido en la envidia de las familias aristocráticas andaluzas por su belleza. La adquirieron hace cuatro años y consta de un edificio central rectangular, otra casa para invitados y una zona de descanso con piscina.
El ágape correrá a cargo de Alda & Terry, un catering habitual en la alta sociedad que pondrá a disposición de los invitados de un cóctel formado por brochetas de salmón con salsa de mostaza dulce, tortitas de gambas al ajillo con guacamole, tostas de foie mi cuit caramelizado o tortitas de maíz con pibil de pato y kimchi, tal y como confirma Vanitatis.
Entre los platos principales, destaca un primero formado por una ensalada templada de judías verdes y vieiras con crema de parmesano, al que seguirá un solomillo de ternera asado con patatas provenzales y champiñón botón. Para el postre, lejos de la tarta tradicional, han elegido un fondant de chocolate con helado de vainilla.
Quienes amenizarán la fiesta posterior serán Los Alpresa, un grupo musical con 40 años de trayectoria muy conocidos en las fiestas privadas andaluzas y habituales de las ferias de Sevilla, Jerez o Córdoba.
Sobre el secreto mejor guardado de la boda, el vestido de Casilda, poco se sabe aparte de que ha elegido un estilismo muy discreto, que no forma parte de ningún diseñador muy conocido. Haciendo alarde de su sencillez, la experta en arte y museología ha decidido confeccionarse a medida el traje en un modisto de Madrid.