El grave problema del Príncipe Harry que pondría en peligro su vida en Estados Unidos

Han pasado dos meses desde que las memorias del Príncipe Harry inundaran todas las librerías del mundo. En sus páginas, el hijo del Rey Carlos III ha realizado ciertas declaraciones sobre su faceta más privada que han estado en boca de todos desde que salieron a la luz. A pesar de que las ventas se dispararon desde su primer día de lanzamiento, lo cierto es que ahora la sinceridad de la que ha pecado podría costarle caro.

Entre todas las fuertes confesiones que escribió el duque de Sussex en Spare, una de las más comentadas ha sido su consumo de drogas. Admitió haber tomado cocaína, cannabis y setas alucinógenas, justificando que realmente le sirvió de mucha ayuda para evadirse de algunos de los traumas que le han marcado su adolescencia, como la muerte repentina de su madre, la Princesa Diana: «Fue la limpieza del parabrisas, la eliminación de los filtros de la vida. Me quitó todo y me trajo una sensación de relajación, alivio, comodidad, una ligereza que logré contener por un periodo de tiempo», decía.

Tales declaraciones han llevado a Heritage Foundation a solicitar que se haga pública la solicitud de visado estadounidense del Príncipe Harry, con el único objetivo de comprobar si el nieto de la Reina Isabel II fue completamente honesto en el cuestionario obligatorio que se pide previamente a la petición, donde se pregunta sobre el consumo de estupefacientes. Las represalias que se llevan a cabo en el caso de que se haya mentido en dicha cuestión son muy graves, llegando a contemplarse la posibilidad de deportación. «Si el Príncipe Harry ha disfrutado de un trato preferente, eso podría minar la confianza de la gente sobre a Justicia en cuanto a la igualdad de todos ante la Ley», manifiesta la citada fundación a través de un escrito.

Por el momento, se desconoce lo que respondió el Duque de Sussex en dicho cuestionario, ya que, hasta ahora, los funcionarios estadounidenses se habrían negado a publicar dicho documento para velar por la «protección de datos». Pero, tal y como señalan dichos expertos, si hubiera dicho la verdad, es probable que no le hubieran aceptado la solicitud de residencia.

El Príncipe Harry reside en el país estadounidense desde 2020, concretamente después de que tanto él como su esposa, Meghan Markle, decidieran desvincularse de todo lo que tuviera que ver con la monarquía británica. En un principio su vida al otro lado del océano comenzó en Canadá hasta que, meses después, se mudaron a Montecito, un pueblo ubicado en el condado de Santa Bárbara, en Estados Unidos.

Allí han decidido empezar una vida nueva junto a sus dos hijos, Archie y Lili. En el documental que han protagonizado en la plataforma de Netflix, el matrimonio confesó que el mudarse al continente americano les cambio por completo la vida: «Nos dio la oportunidad de tener ese hogar que siempre quisimos», confesaron.

Además de volver a estar en primera línea mediática por el problema que podría acarrear al Príncipe Harry el perder su visa, los duques de Sussex también están siendo protagonistas de ciertos rumores que ponen en duda las condiciones que aceptarán para asistir a la coronación del Rey Carlos III, que tendrá lugar el próximo 6 de mayo. Al parecer, tanto el Príncipe Harry como la conocida actriz querrían salir a saludar con el resto de los miembros reales al balcón del palacio de Buckingham, algo que, por el momento, esta solo reservado para los integrantes de la familia Windsor que cumplan actualmente con sus compromisos como royal.