Embutido de la tierra y pastas artesanas: el almuerzo del Rey Felipe VI tras una mañana de esquí

El Rey Felipe VI aprovechó las recientes nevadas y su agenda libre para disfrutar de un domingo de esquí. En esta ocasión, sorprendió al elegir un destino nuevo: la estación de esquí de Valdelinares, en la provincia de Teruel, en lugar de sus habituales Baqueira Beret o Sierra Nevada. Al ser preguntado sobre su elección, respondió: «Es muy bonito y hay nieve».

Ubicada a 2.000 metros de altitud y rodeada de frondosos bosques de pino negro, la estación destaca por su ambiente acogedor y moderno. Con 14 pistas que suman 15 kilómetros esquiables, es ideal tanto para principiantes como para esquiadores más experimentados, ofreciendo recorridos sencillos y descensos más desafiantes.

Felipe VI llegó sobre las 13:30 horas y, tras un par de horas disfrutando de las pistas, decidió recargar energías, como todo buen esquiador. Lo hizo de la mejor forma posible, degustando un almuerzo lleno de los sabores más característicos de la zona. Según algunos de los acompañantes del monarca, en su mesa no faltaron conservas de cerdo, embutidos y deliciosas pastas artesanas. La estación se encargó de sorprender con la gastronomía local, organizando todo rápidamente, ya que la visita fue confirmada solo ese mismo día.

En Teruel, uno de los manjares más famosos es el jamón, que forma parte esencial de los embutidos de la región. Además, las carnes de cerdo son muy apreciadas, y con ellas se preparan platos como las magras turolenses y diversos fiambres tradicionales de la matanza. Otro plato típico son los regaños, una torta que se cubre con sardinas, arenques, pimientos rojos y también jamón. En el apartado dulce, destaca la trenza mudéjar, un postre artesanal hecho con harina, yemas, nueces, pasas y almendras.

Echando un vistazo, encontramos tres establecimientos en el sector 2000, la zona de acceso principal de la estación, donde pudo haber estado. El restaurante Self Valdelinares, que ofrece productos autóctonos, tiene un menú que abarca desde carnes a la parrilla hasta recetas de cuchara y ensaladas. Si lo que se busca es algo más rápido, la Bocatería Dos Mil ofrece bocadillos clásicos y gourmet, además de una hamburguesa de edición limitada. Y para los más golosos, en la primera planta se encuentra El Obrador, una chocolatería perfecta para disfrutar de un dulce capricho después de un día en la nieve.

A pesar de la discreción con la que se movió por la estación, algunos esquiadores lograron reconocer al Rey por su barba y su voz mientras esperaba para tomar los remontes. Según medios locales, estuvo acompañado por su amigo Kyril de Bulgaria, el director de Aramón Nieve de la región turolense, Mario Gómez, y un miembro de su equipo de seguridad. Recalcan que estuvo muy simpático al acercarse a un grupo de niños del Club de Esquí Cota 2000 y algunos adultos. Al quitarse los esquís, los saludó amablemente y muchos aprovecharon para pedirle una foto.