Laschet se rinde ante la inminente entrada de Scholz a la Cancillería de Alemania
El líder conservador sugiere dimitir la semana que viene, respetando la decisión del pueblo y de los partidos minoritarios
En lo que resultó ser el peor resultado para el bloque conservador CDU / CSU de las últimas décadas, el heredero de Angela Merkel, Armin Laschet, asumió su derrota para anunciar ayer que estaba «preparado para dimitir».
Tras una larga semana de incertidumbre al ritmo de la batuta determinante de los partidos GRÜNE y FDP, sabemos por fin que la coalición «semáforo» es la mas probable, y que estos dos partidos minoritarios se decidirán por gobernar junto al SDP y no con el CDU. Lars Klingbeil, secretario general del SDP, comentó que ni siquiera le entraba en la cabeza que las negociaciones con los verdes y los liberales democráticos no fueran a salir bien.
En vista de las circunstancias, Laschet anunciará su dimisión en un congreso la próxima semana. Mientras tanto, un portavoz presente en la reunión entre el FDP, el SDP y el GRÜNE en Berlín había ido muy bien, y que las conversaciones continuarían de forma ya mas concreta e intensiva.
Laschet comenta que su decisión poco tiene que ver con las «personalidades», y mas bien se debe al «interés general del país» y lo que el líder conservador considera mejor para Alemania. Comentó a sus compañeros del CDU que estaría «feliz» «si las cosas salieran mejor con otra gente al mando».
En su informe, sin embargo, incluyó que aún consideraba posible un gobierno conservador en coalición con los verdes y liberales, y que su partido aún contemplaba seguir con los diálogos y negociaciones. Sin embargo, un sondeo al pueblo alemán de este pasado martes sugirió que un 53% de los alemanes apoyaba la coalición SDP-FDP-GRÜNE, mientras que solo un cuarto prefería un gobierno conservador con el CDU en cabeza.