El embajador de China en Nicaragua Chen Xi (D) y Laureano Ortega (Iz) asesor presidencial
Hispanoamérica
China envía embajador a Nicaragua tras la ruptura de Ortega con Taiwán
La dictadura de Daniel Ortega reconoció la doctrina de una 'sola China', rompiendo con Taiwán y restableciendo relaciones diplomáticas con Pekín
El pasado 9 de diciembre la dictadura de Daniel Ortega rompió relaciones con Taiwán y las restableció con China comunista. Este miércoles, seis meses después de ese giro diplomático, el régimen de Pekín envió su embajador a Managua.
Chen Xi, experimentado diplomático con 36 años de carrera y exembajador en Cuba arribó a la capital nicaragüense paras reactivar la cooperación bilateral con el gigante asiático con el que Nicaragua aspira a firmar un Tratado de Libre Comercio (TLC) a más tardar en 2023.
En China «valoramos altamente la posición sostenida por el gobierno nicaragüense de (reconocer) una sola China y que Taiwán es una provincia, una parte inalienable del territorio chino», subrayó Xi tras ser recibido a pie de pista por Laureano Ortega, asesor presidencial para inversiones y aspirante a suceder a su padre.
Managua estableció por primera vez relaciones con Pekín en 1985, durante el primer gobierno de Ortega. Pero en 1990, la administración de la expresidenta Violeta Barrios de Chamorro rompió lazos con China y reconoció a Taiwán.
Cuando Ortega retornó al poder en 2007 mantuvo los vínculos con Taiwán, a cambio de una millonaria asistencia. Pero puso fin a la relación el 9 de diciembre del 2021.
«Una vieja relación»
El acercamiento a China «es el restablecimiento de una vieja relación que ha tenido el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) con el Partido Comunista de la República de China», explicó el canciller de la dictadura, Denis Moncada, durante una entrevista el martes con la televisora rusa RT.
«Es una relación muy positiva, muy constructiva, de beneficio y respeto mutuo» que avanza «de una forma muy dinámica», destacó. China reabrió su embajada en Managua el 31 de diciembre de 2021, pero es hasta ahora cuando cuenta con un embajador.
El restablecimiento de relaciones Managua-Pekín ocurrió en momentos en que Estados Unidos y la Unión Europea intensificaban sanciones contra la dictadura de Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, quienes asumieron el ejecutivo nicaragüense tras un fraude electoral en noviembre de 2021, mientras sus principales rivales políticos se encontraban presos o exiliados.
«Le recibimos con inmenso cariño, con admiración histórica, le recibimos con ese calor humano que nos une a los pueblos y a los gobiernos que avanzamos precisamente en rutas de buena voluntad», dijo Murillo en una alocución.
