Nicaragua
La dictadura de Ortega, tras 6 años de brutal represión, sortea las sanciones internacionales de la mano de China
Este 19 de abril, se cumplen 6 años desde la represión desatada por el régimen sandinista, pero Nicaragua parece resignarse a una dictadura de corte dinástica
Nicaragua cumple seis años desde el inicio de las protestas de 2018 contra el régimen de Daniel Ortega, con 138 opositores y críticos guardando prisión, incluyendo un periodista, dos líderes indígenas y un veterano académico, denunció este jueves el Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas.
Las protestas populares contra los recortes a la Seguridad Social y posteriormente contra la brutal represión contra los jubilados que se manifestaron dejaron al menos 355 muertos según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos nicaragüenses elevan la cifra a 684, mientras que Ortega llegó a reconocer que fueron «más de 300» y mantiene que se trató de un intento de golpe de Estado.
La oposición nicaragüense en el exilio comenzó el fin de semana pasado, en Costa Rica, Estados Unidos y España, principalmente, una jornada de conmemoración por el sexto aniversario de esas manifestaciones antigubernamentales, que también ha dejado el mayor éxodo de nicaragüenses en la historia del país centroamericano.
En noviembre de 2021, la 51 Asamblea General de la Organización de Estados Americanos resolvió por mayoría que las elecciones que garantizaron la permanencia de Ortega en el poder, junto a su mujer y ahora también vicepresidenta Rosario Murillo, «no fueron libres, justas ni transparentes y no tienen legitimidad democrática».
Ortega optó por abandonar la OEA y el 19 de noviembre de 2023, Nicaragua salió del sistema interamericano al cumplirse dos años desde que el régimen sandinista activó el proceso para salir del organismo.
Tras las diferentes olas represivas, Estados Unidos y la Unión Europea impusieron algunas sanciones, sobre todo a nivel individual contra la cúpula del régimen incluyendo a los altos mandos policiales. Sin embargo, Ortega parece cómodo con el asilamiento diplomático impuesto por las potencias occidentales y más bien ha aprovechado el convulso escenario internacional para alinearse con Rusia y China a pesar de que el principal destino de las exportaciones de Nicaragua continúa siendo Estados Unidos.
En los brazos de China
La economía de Nicaragua ha crecido un promedio de 4,7 % en el período 2014-2023, defendió en Managua Jesús Bermúdez, ministro de Fomento, Industria y Comercio del régimen nicaragüense.
Aunque este dato no es confiable ni tampoco se traduce a la economía familiar, el Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento del 3,5 % de la economía de Nicaragua en 2024.
Bermúdez se jactó que desde 2009, «el Gobierno de Nicaragua ha suscrito nueve acuerdos comerciales, incluido uno con China y ha fortalecido las relaciones comerciales con la región centroamericana».
Lo cierto es que China se ha convertido en el sexto principal destino de las exportaciones de Nicaragua, tras la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre ambos países el pasado 1 de enero.
El TLC entre el gigante asiático y el país centroamericano, firmado el 31 de agosto de 2023, comenzó a regir este año, dando acceso inmediato a ese mercado al 71 % de los productos que actualmente exporta Nicaragua con un arancel del 0 %, como la carne bovina, oro en bruto, azúcar, mariscos, miel, ron, chocolate, arneses y textiles, entre otros.
«Este tratado es un hecho histórico que marca una nueva era en la relación bilateral», sostuvo Bermúdez, que centró la lección inaugural en las relaciones comerciales de Nicaragua con China y su impacto en el desarrollo de los nicaragüenses.
La dictadura de Ortega espera que China se convierta en uno de los principales proveedores de materias primas, insumos, bienes de capital, bienes de consumo, maquinaria, equipo, entre otros, y en un comprador de las exportaciones agropecuarias nicaragüenses y que invierta en la instalación de empresas en zonas francas.
A cambio, el régimen de Nicaragua respalda las Iniciativas de Desarrollo Global, de Seguridad Global, de Civilización Global y la de la Franja y la Ruta, promovidas por China.