La batalla por Bajmut en Ucrania se convirtió en la más mortífera para Rusia desde la II Guerra Mundial
Unos 20.000 mercenarios de Wagner murieron en 10 meses para tomar la ciudad ucraniana superando las bajas acumuladas en 10 años de guerra en Afganistán
De acuerdo con documentos recientemente obtenidos por medios occidentales, casi 20.000 combatientes del grupo mercenario ruso Wagner murieron en la intensa batalla por el control de la ciudad ucraniana de Bajmut el año pasado, más hombres que los que perdió la Unión Soviética en la invasión de Afganistán que duró una década.
Hasta 213 mercenarios fueron asesinados cada día, según documentos obtenidos por el Servicio Ruso de la BBC y Mediazona, un medio de comunicación ruso independiente. Wagner perdió más de 19.500 hombres en la campaña de diez meses para tomar la ciudad, la mayoría de los cuales fueron reclutados en las prisiones.
Yevgeny Prigozhin, el difunto jefe de Wagner y ex chef y proveedor de catering de Vladimir Putin, saltó a la fama nacional con vídeos en los que criticaba a los dirigentes militares rusos por no darles a sus hombres suficientes municiones durante la batalla. Finalmente declaró la victoria sobre la ciudad ucraniana en mayo de 2023, levantando las banderas de Rusia y del grupo mercenario en medio de las ruinas carbonizadas de la ciudad.
Según recuerda The Times, el año pasado, Prigozhin dijo en una entrevista que unos 20.000 de sus hombres habían sido asesinados en Bajmut, aunque dijo que sólo la mitad eran convictos. Al menos 5.000 soldados ucranianos murieron defendiendo esa ciudad, según datos de fuente abierta recopilados por UA Losses, una iniciativa ucraniana para rastrear las muertes en la guerra.
Wagner reclutó al menos 48.000 prisioneros para luchar en Ucrania, dos tercios de los cuales procedían de colonias penitenciarias de máxima seguridad. Estas cifras ayudan a explicar «cómo el Kremlin pudo sostener una operación tan sangrienta y por qué Prigozhin estaba tan enojado... con el liderazgo político», dijo a The Times Mark Galeotti, un experto militar en Rusia.
El ejército ruso ha seguido reclutando a decenas de miles de presos, hasta el punto de que varias colonias penitenciarias rusas han cerrado por falta de reclusos. El año pasado, el Ministerio de Finanzas ruso propuso cerrar 57 prisiones para evitar «gastos innecesarios». Ucrania también ha estado reclutando prisioneros, aunque no en la misma medida.