Maduro activa un plan para movilizar fuerzas militares y policiales y así garantizar su investidura como presidente
El gobierno venezolano intensifica las medidas de seguridad tras denunciar conspiraciones en contra de la toma de posesión de Nicolás Maduro para un tercer mandato
A partir de la noche del martes, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó un despliegue masivo de militares y fuerzas policiales en todo el territorio nacional. La medida surge en medio de acusaciones sobre presuntos intentos de impedir su juramentación, programada para el próximo 10 de enero, cuando asumirá un tercer mandato consecutivo de seis años.
Durante un acto frente al palacio presidencial, Maduro activó formalmente el «Órgano de Defensa Integral de Venezuela» (ODI). Este organismo incluye a todos los sectores del poder público, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), la Milicia Nacional Bolivariana, y los distintos cuerpos policiales. Según el mandatario, el objetivo de esta activación es garantizar la «paz, estabilidad y la protección de las familias venezolanas».
El presidente también aprovechó para denunciar la captura reciente de siete supuestos «mercenarios» extranjeros, entre los que se encuentran dos estadounidenses, tres ucranianos y dos colombianos. Estas detenciones se suman a las de otros 125 individuos de 25 nacionalidades diferentes, arrestados entre noviembre y diciembre, bajo la acusación de estar involucrados en actividades «terroristas». Maduro relacionó estos hechos con un supuesto plan desestabilizador liderado por el candidato opositor Edmundo González Urrutia y la dirigente opositora María Corina Machado.
«He tomado esta decisión constitucional para activar por primera vez las ODI y así proteger la tranquilidad del país en estos días cruciales», declaró Maduro. Además, llamó a las estructuras locales a mantener la vigilancia en estados, municipios, parroquias y comunidades. «Queremos demostrar al mundo una victoria ejemplar de paz, pese a las amenazas», agregó.
Las elecciones del pasado 28 de julio desataron una profunda crisis política. La oposición acusa al gobierno de fraude electoral y respalda a González Urrutia como ganador legítimo de los comicios. Por su parte, Maduro ha insistido en que estas denuncias forman parte de una campaña internacional para deslegitimar su gobierno.
En el acto también intervino Antonio Díaz, teniente de la Milicia Nacional Bolivariana, quien expresó su respaldo incondicional al presidente. «Estamos listos para defender la patria y consolidar la victoria del presidente Maduro. Si es necesario, lo haremos con nuestras vidas», afirmó mientras exhibía un fusil.
Históricamente, las acusaciones de conspiración han sido recurrentes en Venezuela, especialmente en períodos de transición presidencial. La situación actual evidencia un endurecimiento del discurso oficial y un incremento de las tensiones internas, mientras el país sigue sumido en una crisis económica y social prolongada. Analistas internacionales señalan que estas acciones podrían exacerbar los enfrentamientos entre el oficialismo y la oposición en los próximos días.