Práctico
El error al repostar de una gasolinera asturiana que ha destrozado decenas de coches
Decenas de conductores denuncian que su coche ha quedado inservible tras repostar gasolina en una estación de servicio de Asturias
Hace sólo unos días que saltaba a los medios un problema registrado por una estación de servicio de una localidad asturiana. En este caso algunos coches denunciaban haber sufrido una avería muy importante en el motor tras echar carburante en esa gasolinera.
Mecánicos, peritos, propietarios de los vehículos y los responsables de la gasolinera se pusieron manos a la obra para analizar qué puede haber sucedido y cuál es la responsabilidad real de la estación de servicio.
Bajo sospecha
Los primeros informes de los talleres a los que llevaron los coches algunos de los afectados hablan de un error de repostaje, pues se trata de coches de gasolina que había sido repostados con gasóleo.
Esto provoca una avería extremadamente serie en el motor que obliga a sustituir tanto el depósito de combustible como las canalizaciones o los inyectores, en definitiva casi todas las partes por las que ha pasado el gasóleo.
Hay que tener en cuenta que el gasoil es más aceitoso que la gasolina y deja rastro allí por donde pasa.
Difícil de eliminar
El paso de los días ha sacado a la luz decenas de casos similares de conductores que están exactamente en la misma situación, todos con un detalle en común, habían repostado en uno de los surtidores de esta gasolinera que ya ha sido precintado.
La estación de servicio ha dado la cara en todo momento y está a la espera de que se aclare lo ocurrido para colaborar con los propietarios asumiendo su culpa, este tipo de establecimientos pueden disponer de un seguro que cubra problemas similares.
El elevado número de afectados ha llevado a la Unión de Consumidores de Asturias ha explicar cómo deberían proceder los propietarios.
¿Cómo proceder?
Lo primero es conservar justificante de pago, después debemos llevar el coche al taller donde tenemos que pedir un informe de la avería que ha tenido el coche, el motivo y una factura con el coste de la reparación.
El siguiente paso es presentarse en la gasolinera donde rellenaremos una hoja de reclamaciones oficial que deberemos presentar en la oficina de Consumo correspondiente a la espera de un dictamen que debería ser concluyente.
Tal y como informa el diario de La Nueva España, a partir de ahí sólo quedan los tribunales en caso de que la respuesta no sea satisfactoria para los conductores.