Un distintivo que no es muy conocido entre los conductores
Curioso
El significado del caballo metálico que llevan algunos coches en la parte trasera
Este tipo de animales tiene una simbología muy clara para algunos conductores que los reconocen y se identifican con ellos
Cada vez es más habitual que los automovilistas pretendan personalizar sus vehículos con diferentes elementos, una moda que viene desde los Estados Unidos y que aquí la normativa limita a utilizar pegatinas en la carrocería y poco más, y además no todas, porque algunas están prohibidas.
Nos referimos a las pegatinas que simulan dorsales o elementos propios de la competición automovilística, pues la DGT los considera una incitación a la velocidad y por ello es sancionable su utilización, aunque algunos conductores los utilicen.
Incitan a la velocidad
Habitualmente los conductores optan por distintivos que les identifican geográficamente o por sus creencias, por ejemplos los asturianos es normal que llevan la Cruz de la Victoria de Don Pelayo y los católicos el pez tradicional con el que se distinguían sus seguidores.
Esta simple imagen identifica a los católicos
En este caso este equino metálico representa el caballo celtíbero que distingue a los naturales de Soria. Se trata de un distintivo que refleja la resistencia numantina que hicieron los celtas en Numancia frente a los ataques de los romanos durante la baja Edad Antigua.
Resistencia numantina
En su día los usaban habitualmente en múltiples objetos como las hebillas de los cinturones, así como para decorar objetos cotidianos como vasijas o ánforas.
Caballo celtíbero en la autopista del Duero
Un símbolo que incluso adorna como una escultura metálica la A-11 conocida como la autopista del Duero y que se ha convertido en un verdadero motor turístico de la zona.
Un animal que refleja el espíritu incansable y luchador de sus habitantes y que cada día es más habitual en la parte trasera de los automóviles.
Símbolo habitual de muchos coches
Este tipo de pegatinas están permitidas por la DGT siempre que no afecten ni a la correcta visión del conductor, por lo que no pueden colocarse en la luna delantera, ni impidan leer correctamente la matrícula.
Conviene comprar siempre pegatinas de calidad para el coche, pues sino el frío y el calor harán que en pocos meses estén envejecidos y feos y pueden llegar a estropear la pintura original.
