Mercado
El CEO de una marca de coches nos cuenta las razones reales por las que no se venden eléctricos en España
Pocas veces un alto directivo de una marca de automóviles permite acceder a una información tan exclusiva que explica por qué las ventas de eléctricos van de mal en peor
El año pasado las ventas de coches eléctricos en España no llegaron ni a un 6 % de cuota de mercado, cuando las previsiones eran de que el año debería haber cerrado con entre un 10 y un 20 %.
Esta nefasta evolución del coche eléctrico en España está obligando a la mayor parte de los directivos españoles a dar explicaciones en sus cuarteles generales sobre la evolución de las ventas de este tipo de vehículos, sobre todo porque este año mucho fabricantes van a tener que pagar importantes multas a Europa por no vender suficientes coches eléctricos, tal y como establece la normativa CAFE.
CAFE para todos
En este caso uno de estos directivos que prefiere mantenerse en el anonimato ha querido compartir con los lectores de El Debate las cinco causas que están tirando por el suelo las ventas de eléctricos, especialmente ahora que el Plan Moves III ya no está vigente.
En orden inverso a la importancia que les da este directivo, la quinta causa sería la imagen que los compradores tienen de los coches eléctricos.
En su opinión el problema es que existe mucha desinformación en torno al coche eléctrico y muchos de los mensajes son negativos, lo que ha terminado calando entre los conductores.
Mala información
Hay mucho desconocimiento de la realidad de los coches eléctricos y muchos mensajes confusos interesados que sólo se centran en los problemas de su utilización.
Tal y como señala este directivo, sólo aquellos que tienen un cargador en casa y tienen solucionado ese problema se atreven a comprárselo, y esa demanda ya está satisfecha, por lo que ahora hay que convencer al resto de compradores, lo cual es mucho más difícil.
El cuarto problema hace referencia a la autonomía, los primeros eléctricos no cubrían las necesidades mínimas de los conductores, aunque esto se va solucionando conforme se incrementan las autonomías de los eléctricos con las baterías de última tecnología.
Todo complicaciones
El tercer problema estaría relacionado con la complejidad de las recargas, con numerosas aplicaciones que hay que llevar en el móvil para poder recargar un coche eléctrico en función de la compañía que uses, a lo que hay que sumar la imposibilidad de pagar con tarjeta de crédito en el cargador.
La segunda de las razones estaría relacionada con la red de carga, a día de hoy hay 38.700 cargadores en España, de los que hay más de 11.500 que no funcionan, lo que deja operativos unos 27.000, lo que no es suficiente en un país tan extenso como este. La densidad de cargadores es mucho mayor en otros países donde sí se venden eléctricos como Francia o Alemania.
De hecho las compañías eléctricas se quejan de que tardan 15 días en montar un cargador y 15 meses hasta que pueden activarlo por problemas relacionados con la burocracia.
El problema más importante
El primero y más importante de los problemas es el precio, pese a las promesas de igualdad de precio con los vehículos de combustión la realidad es que los eléctricos son aún bastante más caros por el elevado coste de las baterías.
Estas cinco razones han creado un caldo de cultivo muy negativo para el coche eléctrico en España, pues los conductores españoles se están decantando masivamente por la compra de vehículos híbridos, la que a día de hoy consideran la opción más razonable.