Imagen del radar en cuestión, de tipo fijo y correctamente señalizado

Imagen del radar en cuestión, de tipo fijo y correctamente señalizado

Sanciones

El radar catalán que ha puesto 8.000 multas en dos meses que sólo pagan los conductores españoles

Este radar está ubicado en la frontera con Francia y prevé recaudar un millón de euros durante los próximos cuatro años

La Junquera es un pueblecito catalán fronterizo con Francia que tiene 3.400 habitantes, que desde hace unos meses están en pie de guerra contra la alcaldesa de la localidad, Miriam Lanero (Junts), por un problema relacionado con el tráfico.

Hace ya unos meses que la alcaldesa firmó un contrato para la ubicación de un radar en la N-II en el kilómetro 773, a su paso por el centro comercial de La Gran Jonquera.

Junto a un centro comercial

Se trata de una zona limitada a 60 kilómetros a la hora, un tramo acotado entre dos rotondas en una área que tiene tráfico tanto de vecinos españoles de los pueblos cercanos, La Junquera, Agullana, Catallop... como de ciudadanos franceses. De hecho, los locales han denunciado a la propia alcaldesa el acoso que están sufriendo por culpa de este radar que salta a 70 kilómetros por hora.

Imagen del tramo en cuestión

Imagen del tramo en cuestiónGoogle Maps

Tal y como informa Crónica Global, los vecinos denuncian haber recibido en sus domicilios decenas de sanciones, algunos hablan de casi cincuenta, por valor de miles de euros que van a suponerles un problema muy serio.

Un conductor con decenas de multas

Jubilados, taxistas y otros trabajadores confirman que se trata de una zona en la que tradicionalmente no ha habido ningún problema en materia de seguridad vial, por lo que piden explicaciones a la alcaldesa, que por el momento sólo confirma que está estudiando lo que ocurre.

La carretera junto al centro comercial La Gran Junquera

La carretera junto al centro comercial La Gran Junquera al que acuden muchos franceses

Se habla ya de hasta 8.000 multas en sólo dos meses, con un pequeño matiz, al tratarse de un radar de ámbito municipal los únicos que las pagan son los conductores españoles, pues los cientos de franceses que circulan por la zona no lo hacen, pues no llegan a su país al menos por el momento.

El problema es que el acuerdo firmado por la alcaldesa es por cuatro años e incluye un millón de euros en multas y todo lo que no sea cumplirlo va a suponer una penalización para el pequeño consistorio español.

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