Luis Moreno Segura (1930-2025)
El empresario que aplicaba la doctrina social de la Iglesia
Fundó en los años cincuenta la Tipografía Católica y en 2003 el Banco de Alimentos de Córdoba Medina Azahara
Luis Moreno Segura
Empresario
Empresario del sector juguetero, en paralelo fundó la Tipografía Católica en 1954 y presidió, años después de jubilarse, el Banco de Alimentos de Córdoba Medina Azahara entre 2003 y 2013.
Tenía apenas 24 años Luis Moreno Segura cuando decidió fundar, en compañía de otros emprendedores, la compañía de Artes Gráficas Tipografía Católica Nuestra Señora de la Fuensanta, Sociedad Cooperativa Industrial. Católica porque de la iniciativa también formaba parte el sacerdote Juan Manuel Font del Riego, ingeniero industrial de vocación religiosa algo tardía pero fructífera, que gozaba del pleno apoyo del entonces obispo de Córdoba Fray Albino González, prelado con genuinas inquietudes sociales.
Pero si esta empresa se llamaba a sí misma católica era también, y sobre todo, porque sus impulsores estaban impregnados de las enseñanzas trazadas por la Doctrina Social de la Iglesia (Dsi). Dar empleo estable a personas desfavorecidas en una España que aún no había probado las mieles del desarrollismo a través de una cooperativa era una forma de aplicarla. Mas aún si se hacía con el concurso de la Hermandad Obrera de Acción Católica.
Así fue como el 24 de mayo de 1954, tal y como recuerda la web del Ateneo de Córdoba, Fray Albino vendió las instalaciones ubicadas en los bajos de un local, propiedad de la asociación benéfica La Sagrada Familia. La mejor prueba de su éxito es que, siete décadas después, Tipografía Católica sigue funcionado bajo el nombre de Imprenta Tecé. Moreno Segura, que la dirigió durante años, compaginaba esta actividad con la gestión de un negocio de juguetería, «Los Tres Reyes».
Como explica a El Debate, Alfredo, uno de sus seis hijos y actual director de Imprenta Tecé, «mi padre ha sido una persona emprendedora, ha ayudado a mucha gente a comenzar negocios o, en otros casos, a empresas que estaban consolidadas, pero con dificultades, Él ponía su granito de arena para sacarlas a flote. Siempre ha sido un hombre de Dios, bueno y generoso con los demás». Por ejemplo, al permitir que Tipografía Católica se encargase de la impresión de La Voz de Córdoba, cuando este diario acababa de salir al mercado y aún no disponía de su propia rotativa.
Los principios cristianos los acogió desde bien pronto. «De pequeño», recuerda Alfredo Moreno, «fue monaguillo de la Iglesia del Sagrario. Tuvo una gran devoción durante toda su vida a María Auxiliadora, participaba en muchos proyectos del colegio de los Salesianos, sobre todo en un grupo de Teatro. Durante muchos años, también estuvo en un grupo de Cursillos de Cristiandad». Su último compromiso espiritual fue con el movimiento de los Focolares. La jubilación profesional, efectiva desde 1995, no significó quedarse de brazos cruzados: en 2003 se convirtió en el primer presidente del recién creado Banco de Alimentos de Medina Azahara que, hoy en día, administra la distribución más de cuatro millones de alimentos al año. Gracias al compromiso desinteresado de personas como Luis Moreno Segura.