Yolanda Díaz contra los saharauis
Agustín Santos ha tenido siempre una muy estrecha relación con Moratinos, de quien ha sido director de gabinete, y a quien ha apoyado fielmente en los intentos de hacer siempre una política promarroquí, llegando a extremos desaforados como la rendición de la posición histórica de España en el Sahara
Éramos pocos y ya saben lo que hizo la abuela. En su afán por impedir el acceso a parte de esa izquierda que Yolanda Díaz quiere restar, ella se ha puesto a buscar fuera de los tropecientos partidos que concurren en la coalición Sumar. Y para el puesto número dos de la lista de Madrid ha encontrado a un conocido activista de un grupo que creo que no concurre con Sumar –al menos no oficialmente– pero sí en la práctica desde que se ha asignado el segundo puesto de la lista a Agustín Santos Maraver, destacado miembro de la organización FoC, iniciales de Friends of Curro. Éste es un poderoso lobby de diplomáticos izquierdistas, agrupados en torno al exministro Miguel Ángel Moratinos, más conocido por Curro. Y ahí oscilan sin disimulo entre la izquierda socialista y los comunistas. Entre ellos Santos Maraver.
Agustín Santos ha tenido siempre una muy estrecha relación con Moratinos, de quien ha sido director de gabinete, y a quien ha apoyado fielmente en los intentos de hacer siempre una política promarroquí, llegando a extremos desaforados como la rendición de la posición histórica de España en el Sahara. Y esto viene especialmente a cuento ahora, porque ésa fue una de las más graves crisis internas del Gobierno de coalición. Podemos –donde estaba Yolanda Díaz– se mantuvo fiel a los saharauis frente al resto del Gobierno.
Yo siempre he creído que la única salida del conflicto del Sahara era negociar su integración en Marruecos con concesiones a cambio. No hubo ni una que conozcamos. Pero sospecho que, si un diplomático del peso de Agustín Santos Maraver entra ahora en las listas de Sumar en tan relevante puesto en la lista, no será para ir allí a hacer lo contrario de lo que lleva media vida promoviendo. Y quizá por eso intentan disimular su presencia con una activista saharaui de número tres de la lista que no creo que les dé ni un voto más que Santos. Es decir, el suyo propio y veremos.
De la excelente relación de Santos Maraver con el Reino alauí fueron testigos los invitados a la segunda boda del diplomático español, que contrajo nupcias con una mujer americana. La celebración fue en Le Mirage de Tánger, uno de los hoteles más lujosos del mundo. Y hablo con conocimiento de causa. El derroche que allí vieron los invitados –entre los que, por supuesto, estuvo Curro Moratinos entre otros altos cargos de la etapa de Zapatero– estaba tan por encima de lo normal que algunos comentaron que «alguien» tenía que haber contribuido generosamente. Ése es un hotel en el que los servicios marroquíes ofrecen grandes suites a clientes seleccionados y a mejor precio. Y luego alguno de ellos se encuentra con la sorpresa de que su pareja y él han sido grabados mientras retozaban en la cama. Y conozco muy bien un caso con nombres y apellidos.
Santos Maraver ha disfrutado los últimos años del respaldo del ministro José Manuel Albares, Napoleonchu. Prueba de ello es que está a punto de cumplir cinco años en su destino, lo que supera el período normal en un puesto. En esta hora en que Agustín Santos ha acabado en las filas de Sumar, cabe preguntarse si ésta no es una prueba más de que se está intentando inflar el partido de Yolanda Díaz desde la Moncloa. Claro que, a ver cómo explican a sus bases la nueva relación de Sumar con Marruecos, siempre tan intensa desde que alguien entró en el teléfono del presidente del Gobierno con el sistema Pegasus.