Celebramos Su cumpleaños

Por una vez incumplo mi propósito de recordar con relativa frecuencia a los más desmemoriados, las felonías del tirano. Sabemos que las perfidias se suceden en el jefe de nuestro Gobierno diariamente, y las repiten como loros los serviles miembros del Gobierno, ya que saben que la insidia que realicen hoy, tapará la de ayer. Por eso es bueno que recuerde las pasadas y también debían hacerlo así el común de los ciudadanos, cuantos más mejor.

Pero como expresa el título, estamos en fechas de celebrar un cumpleaños, sonado en todo el mundo y que a todos nos alegra, menos al tirano y los suyos. Es la Navidad y nos recuerda que hace más de dos siglos nació Jesús, el Niño Dios, y que nos trajo alegría, paz y libertad, eso que ahora nos quieren quitar. Los niños gozan, los mayores también; se escuchan canciones por doquier y las ciudades se iluminan para estos eventos. El nacimiento del Niño Dios es la esperanza del tiempo por venir y por ello olvidemos, de momento, las fechorías de los que tienen el poder. Que la Navidad nos devuelva las ilusiones de la infancia, las satisfacciones de nuestra juventud y la tranquilidad y felicidad de nuestro hogar y nuestra familia. Se cambia de coche, de trabajo, de vestuario, de vivienda, pero nunca de amigos; con ellos, tus amigos, celebra la Navidad. Que cada pensamiento se nos convierta en realidad, cada lágrima en sonrisa y cada problema se resuelva acertadamente. Celebremos con respeto, alegría y sensatez esta Navidad, y no hagamos como algunos políticos catalanes que exponen un Belén que es una burla a los sentimientos del pueblo. Pidamos al Niño que nace, que conceda a los políticos que tenemos un poco de honestidad, decencia y deseos de servir al pueblo que les paga.