Una semana dudosa y tristes expectativas

Analizando la información que nos llega a través de los medios de comunicación y canales diversos, es triste e indignante. Sobrevive la mentira y el engaño por encima de cualquier noticia, ideología o comunicación política razonada y razonable, sobre todo sanchista, ya que la palabra PSOE y lo que significa, ha desaparecido. La pleitesía y sumisión a Pedro I El Mentiroso es manifiesta e indigna, ya que no nos representa. Se olvidan de que hay una mayoría de españoles que votamos otra ideología y que solo se mantiene, por el apoyo de todas esas fuerzas políticas que solo buscan «destruirnos» y aniquilar la Monarquía democrática que nos dimos todos, con el esfuerzo, la lealtad y el compromiso de hacernos un gran país hace más de cuatro décadas.

Tiene usted muchos frentes abiertos y ninguno de ellos con la información necesaria, para que el pueblo conozca y decida que quiere de su futuro. Usted, con tal de permanecer en la Moncloa, acepta, firma, regala y manipula cualquier aspecto que le sostenga en su puesto. El precio por pagar y las consecuencias para otras comunidades o regiones, le importa NADA.

Ejemplos: los compromisos con los catalanes, independentistas, separatistas y nacionalistas según ellos, todo «atado y bien atado» y el resto de nuestro territorio seguimos sin conocer a qué se ha comprometido. Ahora aparecen los vascos, con Otegui, Bildu y los etarras, marcando también sus pasos y sus exigencias. Los temas jurídicos que implican a su entorno, los manipula a su antojo para ocultarlos, minimizarlos o anularlos, en detrimento de ese gran colectivo que son los jueces y la judicatura en general.

¿Y la comunidad autónoma canaria? No solo olvidados sus compromisos con el Volcán de La Palma, a punto de cumplir dos años, que siguen esperando soluciones y actuaciones a su drama de soledad y abandono, ahora se suma el gran drama de la inmigración, a la que usted hace caso omiso y miente cada vez que habla, en detrimento de unos canarios que no merecen este desprecio y esta chulería política, porque siempre nos hemos sentido solidarios y vinculados a todo lo que representamos como españoles de bien, implicados en nuestro crecimiento como patria desde hace siglos.

No convoque juntas nacionales, convoque elecciones generales para que entre los españoles decidamos cuál debe seguir siendo nuestro futuro.