La Cartuja de Jerez abrirá por primera vez en la historia sus puertas a las visitas
Alberga tesoros hasta ahora prácticamente desconocidos de Zurbarán, Martínez Montañés, José de Arce, Pedro Roldán o Esteve Bonet
La Cartuja de Santa María de la Defensión, situada a las afueras de Jerez de la Frontera (Cádiz), ha acogido hoy la rueda de prensa sobre la presentación del proyecto de visitas que comenzará a recibir por primera vez en su historia a lo largo del comienzo del próximo curso. Tras la marcha el pasado marzo de las Hermanas de Belén, sus últimas moradoras, la Cartuja abrirá sus puertas a los visitantes, dando acceso a los espacios no visitables hasta ahora, por ser de clausura.
La diócesis de Asidonia-Jerez se ha hecho cargo del proyecto, y a lo largo del próximo curso –en una fecha por determinar–, se iniciarán las visitas guiadas de martes a domingos. Las entradas, así como más detalles sobre los horarios y precios, están disponibles en su web. La Cartuja estará atendida por las Hermanas Carmelitas Mensajeras del Espíritu Santo, una congregación fundada en Brasil hace 40 años por madre María José del Espíritu Santo.
La Cartuja de Jerez, fundada en 1474 gracias a la dotación del caballero jerezano Álvaro Obertos de Valeto, alberga una impresionante variedad de estilos arquitectónicos y artísticos que abarcan desde el Gótico y el Renacimiento hasta el Barroco. Entre sus tesoros se encuentran obras de grandes maestros como Zurbarán, Martínez Montañés, José de Arce, Pedro Roldán y Esteve Bonet. Este rico patrimonio artístico y arquitectónico contribuyó a que la Cartuja fuera declarada Monumento Histórico Artístico Nacional, el primero en la provincia de Cádiz.
Además de abrir sus puertas a los visitantes, las instalaciones de La Cartuja están siendo rehabilitadas y mejoradas progresivamente. La intención de la diócesis es que este espacio no solo se convierta en un punto de visitas, sino también en un centro para la acción pastoral ofreciendo un lugar de encuentro y reflexión para la comunidad. Se trabaja para la puesta en valor de otros usos del monasterio como servicio de hospedería, recuperación de oficios que han conformado la vida de la Cartuja, su vinculación con el caballo cartujano cuyo patrimonio inmaterial se encuentra en la Yeguada del Hierro del Bocado, así como la integración de la Cartuja en el atractivo proyecto medioambiental de la recuperación del Guadalete. Historia, cultura, tradición, espiritualidad, en convivencia con el ocio saludable, la experiencia gastronómica y el desarrollo del entorno rural. La diócesis busca la colaboración de las administraciones y la sociedad civil para el sostenimiento del monumento más importante de la provincia.