«Que no pasen tanto frío»: la campaña para ayudar a 42 monasterios a combatir el gélido invierno
«Muchas comunidades contemplativas no encienden la calefacción porque no pueden pagarla», aseguran desde la fundación DeClausura
Si calentar una vivienda ya resulta costoso, conseguir que un monasterio de techos altísimos y pasillos interminables alcance una temperatura mínimamente agradable se convierte en una odisea para muchas comunidades de religiosas. Por eso, la fundación DeClausura acaba de lanzar una campaña de micromecenazgo llamada «Que no pasen tanto frío» para ayudar a 42 conventos a sobrellevar los rigores del invierno. Y se han propuesto un objetivo bastante ambicioso: 52.000 €, lo que permitiría repartir algo más de 1.000 € por cenobio.
«Muchas comunidades contemplativas pasan frío; no encienden la calefacción porque no disponen de fondos para pagarla», explican desde DeClausura. «En provincias como León, por ejemplo, se concentra un promedio de 40 días de heladas durante los meses del invierno. El invierno es duro en muchos monasterios y conventos», prosiguen. Y eso, que ya es difícil para las religiosas españolas, supone un sacrificio aún mayor para las que provienen de países con un clima mucho más benigno o para las más ancianas.
«La falta de calefacción supone un riesgo para la salud, que se suma a la humedad existente en edificios antiguos de piedra. Una situación que genera en no pocas ocasiones problemas físicos en articulaciones y otros respiratorios», explican los promotores de la campaña. Pero encender la estufa, claro, conlleva unos gastos, en ocasiones inasumibles para las religiosas, «ya que suponen un coste económico muy elevado para sus posibilidades de gasto». «Por ello suelen hacer un uso muy restringido que resulta insuficiente. Calefactan únicamente pequeñas zonas como la enfermería o las habitaciones de las mayores. Las zonas comunes como el refectorio o la capilla de oración se caldea un poquito a una temperatura baja», agregan.
«Tu apoyo es fundamental; sumando las aportaciones de unos y otros, por pequeñas que puedan parecer, podemos marcar entre todos una diferencia significativa este invierno para muchas comunidades de clausura», concluyen desde DeClausura.