El Vaticano reitera su no absoluto a la eutanasia

Monseñor Vincenzo Paglia, presidente de la Pontificia Academia para la Vida, reafirma la postura de la Iglesia contra el suicidio asistido y la eutanasia, subrayando la importancia de proteger el derecho a la vida, especialmente de los más vulnerables. También resalta la necesidad de evaluar cuidadosamente los tratamientos médicos desproporcionados y la urgencia de brindar mayor atención a los enfermos.

Estas declaraciones se producen en el contexto de la presentación al Papa Francisco del Pequeño Léxico del Final de la Vida, un glosario de 88 páginas publicado por la casa editorial oficial del Vaticano, que aborda cuestiones éticas clave sobre el final de la vida, como la eutanasia, los cuidados paliativos y la incineración. Durante la mañana de ayer jueves, 8 de agosto, el arzobispo entregó personalmente una copia del 'Léxico' al Papa Francisco durante una audiencia privada en el Palacio Apostólico.

Recientemente, este glosario ha sido objeto de atención mediática tras interpretaciones que sugieren posibles 'aperturas' por parte del Vaticano en temas relacionados con el final de la vida. Aunque monseñor Paglia declara a medios vaticanos que «nunca debemos acortar la duración de la vida, pero tampoco debemos empeñarnos en obstruir su curso de ninguna manera», puntualiza que la Iglesia reitera su absoluta oposición a cualquier forma de eutanasia y de suicidio asistido: «Y es también mi convicción, aunque algunos quieran hacerme decir lo contrario», señala el arzobispo.

Así también aclara que las directrices contenidas en el léxico están profundamente arraigadas en las enseñanzas de los Papas y de la Iglesia durante los últimos setenta años y que es necesario «contrarrestar esa 'cultura del descarte' que se esconde tras la pretensión de autosuficiencia y autonomía de las mujeres y hombres de hoy».