Los mejores tipos de piel para una depilación láser eficaz

El color de la piel ha sido desde siempre un factor limitante en cuanto a la eficacia de la depilación láser. Si la piel era oscura había más riesgo de quemadura y la máquina láser debía entregar menos energía, lo que se traducía en una menor efectividad depilatoria.

Afortunadamente, la tecnología ha ido evolucionando y hoy en día un buen centro de depilación láser dispone de varias máquinas con longitudes de onda diferentes, que se van adaptando a la evolución del tratamiento o a los diferentes tipos de piel y pelo. La nueva tecnología láser Soprano ha conseguido sesiones para todas las pieles prácticamente indoloras, aunque es cierto que en España el 80 % de los centros tienen la tecnología convencional, un 15 % disponen de varias longitudes de onda de esta misma tecnología y solo un 5 % ha incorporado Soprano.

Atendiendo a estas cifras será la tecnología convencional la que se encontrará fácilmente y a precios muy asequibles. Carmen Díaz, directora del Centro de Depilación Láser Germaine Goya afirma: «Si tu piel es compatible y soportas cierto dolor, no lo dudes, porque obtendrás una alta eficacia depilatoria a precios realmente populares».

Tipos de piel, eficacia y dolor

La piel clara es el mejor tipo para la depilación láser. El láser basa su eficacia en la absorción de éste por la melanina, que es el pigmento que da color a la piel y al cabello.

Por lo tanto, cuanto más clara y sin pigmentación sea la piel, menos energía atrapará del láser, menos la calentará y mayor cantidad de energía irá al pelo. En conclusión, será un tratamiento seguro para tu salud cutánea, con dolor soportable y muy efectivo.

Busca un centro que tenga láser alejandrita, es la longitud de onda más eficaz e ideal para este tipo de piel.

La piel morena clara a intermedia también es un buen candidato para la depilación láser. Aunque la piel más oscura puede tener más melanina, si soportas el dolor, la tecnología láser convencional te ofrece soluciones seguras y eficaces.

En este caso, tu opción es el láser diodo, una longitud de onda más compatible con la piel morena y con una eficacia más que satisfactoria.

La piel oscura es más difícil de tratar con el láser convencional, su alto contenido en melanina compromete la eficacia y el dolor se hace sentir con bastante intensidad.

El tipo de láser ideal es el Neodimio Yag, una longitud de onda específicamente desarrollada para las pieles muy oscuras. Podrás obtener resultados, pero con más sesiones y te va a doler, por lo que es posible que te apliquen cremas anestésicas antes de tu sesión, lo que es conveniente evitar siempre que sea posible (efectos secundarios).

Para este tipo de piel, hoy en día te sugerimos valorar como primera opción el láser Soprano, asumirás un coste económico más alto pero tendrás descartado el riesgo de quemadura y obtendrás mayor eficacia depilatoria.

Qué pasa con las manchas y tatuajes

En el caso de la piel con manchas marrones o pigmentación irregular, el láser puede agravar las manchas o la pigmentación irregular, por lo que es mejor evitar la depilación láser en estos casos.

Cuando existe un tatuaje, se puede hacer el láser perfectamente en la piel libre, cuidando de cubrir la parte tatuada con cera blanca para que ésta no se vea afectada.

Si estás pensando en hacerte un tatuaje, comienza antes por un tratamiento completo de depilación láser y una vez eliminado el pelo permanentemente, hazte el tatuaje.

Si tienes la piel sensible o fotosensible por que estés tomando algún medicamento, consulta con tu médico antes de someterte a un tratamiento láser.

Algunas personas con piel sensible pueden experimentar irritación o inflamación después del tratamiento. Y si es por un medicamento, el riesgo es la quemadura. En este último caso, es tan sencillo como dejarlo de tomar durante unos días, te haces el láser y vuelves con tu tratamiento farmacológico.

Cómo preparar la piel

Es importante rasurarse con cuchilla 24 horas antes de la sesión. La experta en depilación láser asegura: «Si lo haces días antes, tu pelo habrá crecido y la parte externa se quemará con la luz del láser, provocándote quemadura» mientras que «si te lo hacen en el centro de depilación, no habrás dado tiempo a que tu piel se cure de la agresión de la cuchilla y la luz láser puede provocarte inflamación o hiperpigmentación (manchas)».

La exfoliación de la piel está demostrado que aumenta la eficacia depilatoria. Una piel limpia sin células muertas garantiza una mejor hidratación y una barrera menos para el láser. Utiliza grano y nunca peeling químicos.

La hidratación es otro de los puntos importante. El Centro de Depilación Láser Germaine Goya explica que hay que empezar 3 días antes de tu sesión láser y continua durante otros tantos después.

• Hay que utilizar cremas específicas para depilación láser, deben regenerar tu piel e hidratarla profundamente, no valen las cremas generalistas corporales del súper.

• Bebe agua, mucha agua, aumentarás la hidratación de los tejidos y su elasticidad.

• Si tu piel está correctamente hidratada, no se resecará durante la sesión láser y las posibles lesiones por el calor no ocurrirán.

Piel morena, mejor no

La tecnología láser convencional no es especialmente compatible con la piel morena, además hay que respetar no tomar el sol 15 días antes de la sesión y 15 días después.

Si necesitas hacerte el láser en verano, tranquila que hay solución, la tecnología Soprano es compatible con pieles recién bronceadas y no tiene riesgo de quemadura. Asegura antes que dispones de un centro con esta tecnología y asume que el precio será varias veces el del láser convencional.

Ojo a la medicación

Si tomas ibuprofeno de manera recurrente, no puedes depilarte. Y hay una larga lista de medicamentos fotosensibles que potenciarán sobre tu piel la luz ultravioleta (sol, láser, UVA,…) y pueden provocarte quemadura.

Consulta con tu médico porque la solución es simple: suspendes la medicación unos días, te haces la sesión láser y reanudas la medicación.

En conclusión, hoy en día es posible olvidarte del pelo para siempre sea cual sea tu fototipo de piel. Solo tienes que elegir la tecnología que más se adapte a tu piel, teniendo en cuenta tu tolerancia al dolor y presupuesto.