Síndrome de Stendhal
¿Qué es el síndrome de Stendhal o síndrome del viajero? ¿Es real?
¿Es posible sufrir un ataque de pánico por el impacto psicológico de estar ante una gran obra maestra y de viajar?
El síndrome de Stendhal demuestra el impacto que el mundo puede tener sobre nosotros. Es lo que le pasó a Henri Beyle, escritor francés conocido por novelas como «Rojo y negro», cuyo pseudónimo era Stendhal, en su viaje a Florencia, por quien toma su nombre el síndrome.
«Experimentaba una especie de éxtasis por la idea de estar en Florencia… Me sobrecogió una feroz palpitación del corazón… El manantial de la vida se secó dentro de mí, y caminaba con el miedo constante de caer al suelo», escribió Stendhal sobre su viaje a la capital toscana en 1817.
Confirmaba así, que un viaje, en su búsqueda de conocimiento y emoción, puede llegar a causar malestar psíquico, pudiendo el viajero necesitar solicitar atención médica en algunos casos. En 1979, la psiquiatra, Graziella Magherini, estudió a los turistas que visitaban esta ciudad con gran abundancia de arte. Sufrían mareos, alucinaciones, palpitaciones y despersonalización al contemplar algunas de las obras, como las pinturas de Botticelli o esculturas de Miguel Ángel.
¿Cuál es la causa y síntomas del Síndrome de Stendhal?
El síndrome del viajero es una enfermedad psicosomática que puede ser provocada por una especie de saturación o sobredosis de belleza. Por lo general, esta suele darse ante una exposición de riquezas artísticas. Se trata de una sobreestimulación del cerebro ante tal desmesurada belleza que puede generar estas alteraciones intensas.
Algunos de los síntomas de este síndrome son temblores, taquicardia, sensación de desorientación y confusión o de presión en el pecho y ahogo, sudoración, fatiga y cansancio, mareos y vértigos o visón borrosa. A su vez, puede provocar cambios intensos de humor como pasar de euforia a tristeza, alteraciones del pensamiento, lo cual incluye delirios, despersonalización o alucinaciones, puede provocar ansiedad o sensación de estrés intenso y trastornos de los afectos.
Diagnóstico y tratamiento del síndrome
Debido a que cada persona puede manifestarlo de forma diferente, el diagnóstico del síndrome de Stendhal se hace de manera individual. Puede depender de los antecedentes de cada uno y hay que tener en cuenta la sintomatología referida.
Respecto al tratamiento, se trata de algo temporal en lo que prima aliviar los síntomas. Puede ser que haya casos que requieran llevar a cabo psicoterapia. Con el fin de evitar el síndrome, es necesario descansar lo suficiente, estar hidratado y bien alimentado y protegerse del sol.
¿Es real este síndrome? Existe controversia
Existe cierta controversia sobre este síndrome, que algunos consideran una patología y otros una sugestión artística. Por ello, muchos dudan que realmente sea considerado un síndrome y no una reacción autoinducida, ya que gran parte de este cuadro psicosomático incluye síntomas leves que se manifiestan de forma positiva, como el placer o la emoción.
Cristina Loreto, psicoterapeuta que vive y trabaja en Florencia, aseguraba en declaraciones recogidas por la BBC, que «A veces, en los Uffizi, ciertos visitantes tienen ataques cardíacos o se sienten enfermos, pero esto puede ser producto de pasar tiempo en un espacio cerrado con cientos de otras personas. Podría ser agorafobia, no Botticelli».
Según explicaba Loreto, una reacción emocional ante el arte, no constituye un trastorno psiquiátrico, incluso si conduce o contribuye a síntomas angustiantes o peligrosos.