La Sanidad pública inglesa recibe 20.000 denuncias de comportamientos sexuales por parte de los pacientes
El acoso cotidiano que recibe una especialista le ha hecho reevaluar especialidad e ingresar en obstetricia y ginecología para no tener que tratar a hombres
La Sanidad pública del Servicio Nacional de Salud de Inglaterra está en crisis. Según ha descubierto una investigación, miles de empleados han denunciado agresiones sexuales y acoso por parte de los pacientes. Esto ha provocado una gran indignación, y ha hecho que los ministros tengan que abordar «la amenaza diaria de abusos» que reciben los facultativos diariamente.
Desde el año 2017 hasta 2022, más de 20.000 médicos han denunciado presuntos incidentes de violencia sexual y conducta sexual inapropiada por parte de sus pacientes, según publica el diario The Guardian.
Las acusaciones incluyen denuncias de violación, agresión sexual, acecho, acoso y comentarios sexualizados no son las únicas que ocurrirán. Los expertos han avisado de que es probable que las cifras vayan en aumento, ya que los pacientes a veces se ven disuadidos a presentar una queja.
Deeba Syed, oficial sénior de la línea de ayuda de los Derechos de la Mujer, explicó a The Guardian que las mujeres que trabajan en el ámbito de la sanidad se ven «presionadas» para seguir trabajando con los pacientes que son abusivos sin que se haga nada para protegerlas adecuadamente.
En este sentido, Syed argumenta que escuchan testimonios «preocupantes» de mujeres que se sienten coaccionadas para «no presentar quejas formales». Esto sucede porque desde la dirección del mismo centro les explican que es más útil moverlas a ellas que al paciente que acosa.
Uno de los casos que explica el periódico británico es el de Katie –nombre inventado– a la que los pacientes habían acosado con comentarios sexuales desde que estaba estudiado en el centro. «Desde el primer momento dentro de la colocación clínica, siempre me sentí muy sexualizada por los pacientes», apuntó. «Una vez, cuando tuve que acercarme a la cara de un paciente para examinar sus ojos, el paciente comenzó a lamerse los labios y frotarse». Esto le sucedió con 19 o 20 años, cuando el tutor había salido un momento de la habitación.
Este no fue el único suceso, también ha experimentado preguntas groseras como si «dar placer» a un paciente masculino. A pesar de esto, Katie no se sentía en confianza de contárselo a nadie. El acoso cotidiano la ha hecho reevaluar especialidad y espera ingresar a obstetricia y ginecología para no tener que tratar a hombres. «Creo que el acoso sexual me afecta demasiado y me hace sentir como una mierda».
Simon Fleming, un cirujano ortopédico y coautor del informe de 2021 sobre las agresiones al personal sanitario aseguró que los pacientes abusan de los trabajadores de hospitales «a menudo». Según el facultativo el NHS debe dejar de permitir que los pacientes y el personal se comporten de una manera que haga que la atención médica sea «menos segura para todos nosotros».