
Complementos adelgazantes
Complementos
La OCU denuncia 11 complementos adelgazantes por irregularidades
La Organización de Consumidores y Usuarios ha denunciado estos productos ante la Agencia Española de Seguridad Alimentaria
Los complementos alimenticios para adelgazar son cada vez más populares para bajar de peso. Pero lo cierto es que, como remarcan desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), no existe evidencia científica que demuestre que son eficaces. Además, no tienen por qué contar con la aprobación de la Autoridad Sanitaria Europea, por lo que las irregularidades en este tipo de productos está a la orden del día.
Según la última encuesta OCU sobre complementos alimenticios, un 18 % de españoles compra y consume este tipo de productos. Sin embargo, desde este organismo aseguran que, lo mejor para perder peso de forma saludable, es mantener una dieta equilibrada y hacer ejercicio físico con regularidad. Ni siquiera las famosas inyecciones para adelgazar son una solución idónea, ya que puedan producir muchos efectos secundarios y un efecto rebote.
Irregularidades en adelgazantes
Ahora la OCU ha denunciado ante la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN) irregularidades hasta en 11 complementos adelgazantes.
Entre ellos encontramos el Fasterdox, un complemento que contiene efedrina, una sustancia ilegal, y que, además, incumple los requisitos del etiquetado de complementos alimenticios. Estas sustancias ilegales se incorporan de forma fraudulenta a los complementos alimenticios porque suprimen el apetito y estimulan el metabolismo.Además, en lo que respecta a las declaraciones de propiedades saludables de los ingredientes de los complementos comprobados, también incumplen la normativa por no contar con el certificado CE:
- BeFIT de Healthy Fusion y
- Drenaslim de Balance Nutrition,
- Bloqueador de carbohidratos de Q77+
- Natuslim de Natusure
- Adiós Kilos Rapid de Healthy Fusion.
Otro problema muy habitual es recurrir a supuestas alegaciones adelgazantes de plantas, una práctica que no está admitida por la AESAN. Es el caso de los siguientes complementos adelgazantes:
- Bloqueador de carbohidratos de Q77+,
- Detox+ Slim de Unik Health & Nutrition,
- Figu-Line de Laluz,
- Lipo 7 de Invictus Red Line,
- Lipostil 4 en 1 de Denipharma,
- Natur Cleanser de N2 Natural Nutrition
- Proslim-20 de Detoxify.
El problema de los componentes botánicos
Una amplia mayoría de los productos diseñados para favorecer la pérdida de peso incluyen entre sus ingredientes extractos botánicos. Pese a su origen natural, estos compuestos no están exentos de riesgos, ya que pueden provocar efectos secundarios e incluso presentar contraindicaciones médicas. En el análisis realizado, se constató que todos los complementos examinados contienen este tipo de ingredientes.
En este contexto, la Comisión Europea aún no ha definido un procedimiento de evaluación claro que permita a la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) verificar la validez de las propiedades saludables atribuidas a las especies botánicas utilizadas en los complementos alimenticios. Actualmente, se encuentran pendientes de resolución un total de 1.548 declaraciones relacionadas con los beneficios para la salud de estos extractos botánicos.
Estas declaraciones, que aún no han sido aprobadas ni rechazadas por la EFSA, forman parte de un proceso regulatorio que busca dotar de mayor rigor científico y legalidad a las afirmaciones promocionales que los fabricantes incluyen en el etiquetado o publicidad de sus productos. La falta de resolución sobre este elevado número de alegaciones pone de relieve la complejidad del asunto, así como la necesidad urgente de establecer criterios claros y armonizados a nivel europeo.
Mientras tanto, los consumidores continúan expuestos a productos cuyas supuestas virtudes no han sido validadas por las autoridades competentes. Esto genera incertidumbre tanto en el ámbito sanitario como en el comercial, y plantea interrogantes sobre la eficacia real de estos complementos y su impacto sobre la salud pública.
Por tanto, hasta que no se establezca un marco normativo definitivo que permita evaluar y autorizar —o rechazar— las declaraciones sobre beneficios saludables de los extractos botánicos, estos seguirán en un limbo regulatorio, con consecuencias tanto para los usuarios como para los fabricantes.