Cantabria cierra un fin de semana negro para sus montes con un balance de 78 incendios

Unos 200 efectivos han estado luchando contra el fuego este fin de semana en Cantabria, donde se han registrado 79 incendios forestales desde la noche del viernes en sus montes, de los que quedan dos focos, aunque ya controlados, a última hora de este domingo.

El cambio en las condiciones meteorológicas que se ha producido este mañana ha ayudado al operativo a extinguir la mayoría de las llamas. Después del fuerte viento sur y de las altas temperaturas de este sábado, la lluvia ha dado un respiro y a la una de la tarde quedaban seis incendios, tres de ellos controlados.

Según el último balance del Gobierno regional, poco antes de las 20.00 horas había solo dos focos, ambos controlados, en Valdeprado del Río y en Dobres (Vega de Liébana) de los 17 que se han declarado en las últimas 24 horas. Desde las 20.00 horas del viernes, el recuento sube a 78 y, en lo que va del mes de abril, han sido 90.

No obstante, el Gobierno de Cantabria mantiene activa la fase de premergencia del Plan Especial de Incendios Forestales (Infocant), ya que este lunes se prevé nivel amarillo de riesgo de incendios y el operativo sigue en nivel máximo de alerta.

Este operativo está compuesto por técnicos del medio natural, bomberos forestales y la central de emisoristas de la Dirección General de Montes y Biodiversidad, apoyados por técnicos de protección civil del Gobierno de Cantabria, bomberos y la Sala del 112, además de las agrupaciones municipales de protección civil.

Este domingo han contado con el apoyo de un helicóptero la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) con base en Jaedo, Ruente, para actuar en un fuego en Sarceda (Tudanca).

Este sábado, la cercanía de los focos a la estación de tren en Casar de Periedo, en Cabezón de la Sal, obligó a cortar el tráfico ferroviario, que ha sido restablecido este mañana.

Además, un incendio en los montes de Cabuérniga quemó una zona de almacenamiento de un camping de Sopeña, en Rionsansa ardieron 17 hectáreas de pinar que iba a ser talado y también sufrió daños una ganadería de La Busta.