La mejor película anticipatoria es infantil

Los devotos del credo Nolan y en particular de Interstellar recordamos esta semana que fue un 26 de octubre de 2014, cuando se estrenó en Estados Unidos –en España fue al mes siguiente– la que para muchos es la mejor película del siglo XXI. Han pasado ocho años en la Tierra, pero –como recordaba un tuitero– solo una hora y 53 segundos en el planeta Miller, aquel de las olas gigantes. Hasta dentro de unos cuantos siglos no sabremos si este largometraje protagonizado por Adán (Matthew McConaughey en su papel de Cooper) y Eva (Jacqueline Hathaway como Amelia) habrá anticipado bien el futuro.

Sí podemos juzgar en el caso de Regreso al futuro 2 (1989) puesto que el tiempo que nos anticipaba ya lo hemos pasado. En concreto, hace unos días se cumplieron siete años de aquella fecha. Doc interrumpe la charla entre Marty y su novia para decirle que hay un problema con el hijo de ambos en el futuro, y que hay que viajar en el DeLorean para arreglar el desaguisado. Allá se van al 21 de octubre de 2015. No usamos dos corbatas a la vez –Pedro Sánchez reniega incluso de vestir una– y las predicciones metereológicas no son precisas al segundo, al contratrio de lo que se refleja en la película pero las videollamadas y las gafas de realidad aumentada sí son una realidad, y ya hace tiempo que se han desarrollado prototipos de monopatines y coches voladores. Es por estas y otras razones que muchos consideran Regreso al futuro 2 la mejor película anticipatoria de la historia del cine, o al menos la que más acertó entre las más populares. Robert Zemeckis y Bob Gale, los guionistas, serían entonces lo más parecido a Julio Verne que ha dado el séptimo arte.

Tienen su mérito, puesto que anticiparse al futuro con la ficción es una labor complicada y al alcance de muy pocos, como lo prueba aquella «verdad incómoda» por la que la dieron el Oscar de Hollywood a Al Gore, un documental catastrofista con bastantes trolas y según el cual poco menos que a estas alturas ya tendría que haberse producido el fin del mundo.

Estaban yo pensando en si era o no Regreso al futuro 2 la mejor película anticipatoria cuando me enviaron por WhasApp una noticia reciente de un telediario en la que se decía que en Bilbao hay 8.000 perros más que niños. Esto viene ocurriendo en esa y otras ciudades desde hace unos años, y solo hay que pisar las aceras –plagada de minas en forma de heces y de ríos de ácido úrico– y los parques –donde los padres son cada vez más mayores y los niños más escasos– para comprobarlo. Caí entonces en la que es sin duda la mejor película anticipatoria. Este es el argumento: la compañía BabyCorp tiene un malvado plan para acabar con los bebés, que serán sustituidos por manadas de animales similares a Puppy, el Cachorro Eterno, la mascota –y el hijo– perfecto. No hay ser más cuqui que el tal Puppy, totalmente irresistible. La última esperanza de la humanidad, el último bastión de resistencia ante un futuro con menos bebés que en El cuento de la criada y con más perros que en 101 dálmatas es un bebé, pero no uno cualquiera, sino uno vestido con traje.. y corbata. Solo él puede impedir que ese plan salga adelante. ¿Es o no anticipatorio el argumento? Pues hablamos de una película de 2017, El bebe jefazo. Una película infantil. ¿O de ciencia-ficción?