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Fraga, en una imagen del documental

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¿Dijo Fraga «la calle es mía»?

Un documental recuerda el presunto origen de la frase más famosa atribuida al fundador del Partido Popular

Hay frases que van asociadas a determinadas personas y, más allá de que sean o no ciertas, no hay manera de que dejen de estarlo porque ya forman parte del acervo popular. Así, a Pablo Picasso se le atribuye un «la inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando», cita que no aparece en ningún libro canónico sobre el artista. En el caso del gallego Manuel Fraga, la frase es, sin duda, «la calle es mía». ¿Pero es realmente de él? En este caso, es el propio protagonista lo niega, pero la persona a lo que se lo dijo siempre se ha mantenido en sus trece. El asunto viene a cuenta ahora porque Amazon Prime Video ha incorporado a su catálogo Últimos testigos, Fraga, un documental de 2009 donde se recuerda este episodio.

Primero hay que situarse en la época. Estamos en 1976. Franco ha muerto y los partidos de izquierda se están movilizando por la democracia y llevan sus protestas a las calles. El 1 de mayo de ese año se convoca el Día del Trabajador, que tiene seguimiento: «Y cuando el día 1 de mayo, que fue el día en que se intentaron las grandes movilizaciones, se pasó aquello con relativa tranquilidad, yo ya sabía que la Transición estaba asegurada», cuenta en el documental el entonces ministro del Interior.

El madrileño Ramón Tamames, que entonces era militante del PCE, interviene justo después para recordar que estaba organizando junto a sus camaradas una manifestación «enfrente del Ministerio de Trabajo» cuando Fraga lo llamó por teléfono a su casa. Tenían cierta relación, e incluso el gallego se había reunido con Tamames en Londres en la época en la que era embajador en la ciudad inglesa, con la intención de atraerlo hacia sus postulados, ignorando quizá que ya militaba en el comunismo. Esta fue la conversación tiempo después, ya en 1976.

—Oye, Tamames que sé que vais a montar una manifestación hoy.

—Sí.

—Pues está prohibida.

—Bueno, pero la calle es de todos.

La calle es mía.

—La calle será tuya, pero nosotros lo que queremos es la democracia.

—También la quiero yo.

—Pues a ver si os dais prisa, porque llevamos ya meses y no sabemos por dónde vais a salir.

—El timing lo marco yo.

Tamames recuerda que llegó a solicitar autorización al ministro para revelar esta conversación en público: «Yo le pedí permiso incluso, porque tenía una reunión de la Junta Democrática de Madrid esa tarde, para decirlo a los periodistas que estaban allí. Al día siguiente toda la prensa estaba con el ‘la calle es mía’».

Sin embargo, Fraga niega la mayor: «Esa frase la dijo un director de la Guardia Civil que ya no es de este mundo», sostiene. «Yo no hubiera usado esta frase, pero evidentemente mi deber era mantener la calle de todos».

«Dice que esa conversación no existió, pero que Dios salga del cielo y me quite los oídos», zanja el asunto Tamames. «A las pocas semanas nos metió en la cárcel por otra manifestación a la que fuimos», añade a continuación entre risas.

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