Entre las izquierdas y las derechas: el fascismo explicado con objetividad
Una historia erudita y honesta del fascismo, donde el sesgo ideológico se encuentra ausente. José Luis Orella prima la objetividad y los hechos históricos, arrojando una claridad sobre el tema muy necesaria hoy
El término «fascismo» se ha convertido en la actualidad en una suerte de palabra comodín, a veces incluso una muletilla. En el léxico de una parte determinada del espectro político español el término de uso peyorativo «fascista» se ha instalado de manera incontestada, cuando lo cierto es que no existe hoy ningún grupo con representación parlamentaria cercano al fascismo. Ni siquiera con tintes fascistoides. De hecho, la lucha contra el sistema liberal, principal enemigo del movimiento fascista, se encuentra ya únicamente en programas políticos de extrema izquierda, que hoy comparte el Ejecutivo en nuestro país con un partido que se autodenomina socialista. Este uso torticero e, incluso, malintencionado del término acarrea realidades peligrosas, como la deformación interesada de las palabras, tras lo cual se esconde la manipulación y el engaño.
El único antídoto existente –si se está ya herido–, o vacuna –si se está todavía a tiempo–, para estos males no puede ser otro que la historia, «testigo de los tiempos, luz de la verdad, vida de la memoria, maestra de la vida», en palabras de Cicerón en su Sobre el orador. En este sentido la nueva obra Historia del fascismo (Sekotia, 2023), del profesor de Historia Contemporánea en la Universidad CEU San Pablo, José Luis Orella, destacado especialista en pensamiento político del siglo XX en España y Europa, corporativismo y populismos identitarios, viene a arrojar claridad sobre una cuestión excepcionalmente compleja como es la del fascismo, y que ha sido, y es, tan tergiversada.
sekotia / 320 págs.
Historia del fascismo
Una de las primeras afirmaciones realizada por el autor al comienzo de la introducción al volumen avisa de la difícil tarea: «El fascismo es un movimiento político difícil de definir, […] fue un antecedente de la actual indefinición de algunas corrientes políticas, al proceder del socialismo izquierdista, pero también tener claros antecedentes derechistas». Una afirmación esta que seguramente a muchos resultará chocante, pero que el autor sostiene sobre un armazón teórico sólido y sin fisuras.
Desde el movimiento nacionalista francés de Charles Maurras y el sindicalismo revolucionario de Georges Sorel, a finales del siglo XIX y comienzos del XX, José Luis Orella expone sintética y claramente los antecedentes del movimiento que terminaría cristalizando en la Italia de posguerra de la mano de un antiguo socialista: Benito Mussolini. Aun así, el volumen está lejos de ser un monográfico sobre el líder de Predappio, y se pueden encontrar también nombres fundamentales como los de Alceste de Ambris, sindicalista revolucionario, Gabriele D’Annunzio, prominente nacionalista, poeta y excombatiente, Filippo Tommaso Marinetti, literato fundador del movimiento futurista, o Mario Carli, exmiembro de los arditi, cuerpo de élite de las fuerzas de asalto del ejército italiano a finales de la Primera Guerra Mundial.
Una importante cuestión expuesta por el autor en los antecedentes es la de las consecuencias de la Primera Guerra Mundial en toda una generación de excombatientes italianos que, si ya antes del estallido de la gran conflagración estaba inflamada de nacionalismo y rechazaba la sociedad burguesa liberal, tras el conflicto, con la inauguración de la cultura de masas, se convertirá en una fuerza difícil de parar. Si una de las consecuencias de Primera Guerra Mundial fue empujar a muchos autores a abrazar el pacifismo, otra fue, sin embargo, espolear a otros –y esto fue una característica común con otros casos como el alemán– hacia una combatividad política constante, incluso la lucha y el uso de la violencia en el ámbito político.
Otros puntos sumamente interesantes que expone y desarrolla José Luis Orella en este volumen fundamental son la construcción del nuevo Estado fascista con la incorporación de la mujer y la juventud al engranaje político y social italiano, o la eclosión de otros movimientos, fascistas o asimilables al fascismo, en Europa y el mundo.
Finalmente, en la última sección del volumen, el autor explica el destino del fascismo tras la Segunda Guerra Mundial, o la muerte del fascismo de combate, donde destaca el interesante recorrido de los movimientos políticos herederos de algunos aspectos del fascismo y su enfrentamiento con la izquierda más radical italiana, para acabar con un análisis preclaro de los actuales partidos y movimientos derechistas italianos como los liderados por Salvini y Meloni.
Esta obra ofrece a un público no especialista la herramienta ideal para entender teórica e históricamente el movimiento fascista, y para alejarse, paralelamente, de lo que voces confundidas o malintencionadas pretenden imponer a las mentes desinformadas.