Grave crisis
Sri Lanka colapsa y el Gobierno pide a su población que emigre
La escasez de alimentos y combustible lleva al país asiático a eliminar un día de trabajo durante tres meses
El Departamento de Información Gubernamental de Sri Lanka anunció hace unos días que «parece apropiado otorgar a los funcionarios del Gobierno un permiso de un día hábil para que realicen actividades agrícolas en sus patios traseros o en otros lugares como una solución a la escasez de alimentos que se espera».
Soldados en las gasolineras
Este parche es uno más a la delicada situación que vive Sri Lanka desde hace meses. En abril la población tomó las calles para protestar por los problemas financieros y políticos que provocan la ruina de muchos negocios que se han visto obligados a cerrar. Las neveras o los aires acondicionados no funcionan y la falta de alimentos y gasolina provocan colas kilométricas en las tiendas. Además, en las gasolineras es habitual ver a soldados para evitar disturbios a la hora de repostar tras largas colas bajo el intenso calor húmedo.
El país situado al sur de la India sufre graves problemas de escasez de alimentos y de gas que afecta a los 21 millones de habitantes. Su Gobierno ha decidido permitir que no se trabajen los viernes durante los próximos tres meses para reducir gastos y fomentar el consumo propio en los patios de las casas.
La medida afectará a un millón de trabajadores, aunque los que trabajan en servicios esenciales, hospitales, puertos o energía no podrán disfrutar de ese día extra de vacaciones.
Otra de las medidas que han hecho públicas es la de animar a sus ciudadanos a aceptar ofertas de trabajo en el extranjero para que puedan enviar dinero al país y aumentar la riqueza. Los funcionarios que quieran acogerse a esta medida podrán pedir una excedencia de hasta cinco años y no serán perjudicados a la vuelta.
Rescate del FMI
La situación de Sri Lanka es tan preocupante que se espera un rescate del Fondo Monetario Internacional para finales del mes de junio.
Los críticos con esta medida aseguran que la mayoría de funcionarios que podrán disfrutar de esta medida no son dueños de sus tierras por lo que no la podrán cultivar libremente como pide el gobierno.