La afiliación extranjera ya supone el 13,5 % del total.
Las economías europeas respiran gracias a la inmigración en pleno auge de la derecha
Los flujos migratorios están salvando las delicadas economías comunitarias, que sufren graves problemas de escasez de mano de obra cualificada
Al tiempo que los europeos observan el ascenso de partidos de retórica proteccionista y antiinmigración a los gobiernos de la Unión, los flujos migratorios están salvando las delicadas economías comunitarias, que sufren graves problemas de escasez de mano de obra cualificada.
El informe de primavera de la Comisión Europea es tajante al respecto: «Al igual que otras economías avanzadas, algunos estados miembro de la UE –especialmente aquellos que experimentan mercados laborales ajustados– se han beneficiado de los grandes flujos migratorios, así como de un alto grado de integración de los trabajadores migrantes que ha ayudado a reducir la escasez de mano de obra y habilidades».
El documento destaca que el aumento de las cotizaciones a la seguridad social en 2023 en Alemania ha estado impulsado «casi exclusivamente» por trabajadores foráneos, mientras que, en España, la creación de empleo contribuyó a aliviar la escasez de mano de obra «en algunos sectores como la hostelería y la construcción».
«En términos anuales, el empleo [en España] creció un 3,2 % respaldado por la persistencia de fuertes flujos migratorios. La tasa de desempleo cayó al 12,1 % el año pasado y se prevé que siga disminuyendo aún más, aunque se mantendrá en un nivel elevado, alcanzando el 11,6 % en 2024 y el 11,1 % en 2025», señalan los autores.
Nuestro país registró el pasado mes de mayo la tasa más alta de afiliación extranjera desde que hay registros, con 2.882.967 trabajadores. Estos afiliados extranjeros, de hecho, ya suponen el 13,5 % de la afiliación total en España, tres puntos y medio más que hace una década.
La mayor parte de estos afiliados proceden de Marruecos, con 358.371 personas, por delante de rumanos (351.890), colombianos (205.890 afiliados), italianos (194.182), venezolanos (157.784), chinos (117.761), peruanos (79.408), ecuatorianos (73.615) y ucranianos (70.675), que han aumentado un 48,5 % desde el comienzo de la invasión rusa.
Esta situación se produce en pleno auge de los partidos de derecha ‘dura’ en Europa, que ya gobierna en Italia y Hungría, pero cuenta con una importante representación en Países Bajos, Croacia o Finlandia, mientras que en Francia han sido los ganadores de la primera vuelta.
No obstante, las políticas de cada país están siendo radicalmente distintas. Giorgia Meloni aprobó el pasado año la entrada de casi medio millón de trabajadores no comunitarios ante el alud de peticiones de empresarios ante la falta de mano de obra, especialmente en sectores como la agricultura y el turismo.
Inmigración ilegal
Otro asunto es el de la inmigración ilegal. Según los datos de la Agencia Europea de Fronteras (Frontex), en 2023 hubo 380.000 intentos de entrada irregular en las fronteras de la Unión, principalmente en el Mediterráneo central, donde se detuvieron a 158.000 personas.
Además, la UE es la región con mayor aumento de refugiados en los últimos tres años, estimulada por la llegada de más de cuatro millones de ucranianos desde el inicio de la invasión rusa, según el Atlas de la Migración publicado en diciembre por la Comisión.
