La responsabilidad de los políticos: la UE exporta tres veces más que China, pero nadie lo sabe

Me pasó ayer mi socio y amigo Ignacio Basco una infografía que habían publicado en LinkedIn, donde venía a demostrar que China era el amo del mundo en exportaciones y parecía como si la suerte ya estuviese echada y no habría ni Rubicón que cruzar.

La infografía mostraba como China estaba dominando el mundo de las exportaciones y como Estados Unidos había perdido la batalla. Además, en el mapa, la Unión Europea no existía, había desaparecido del mapa mundial y podíamos dedicarnos a ponernos de rodillas y suplicar que los chinos y los estadounidenses no se nos merendasen o, al menos, no lo hiciesen sin cocinarnos a fuego lento, que es menos doloroso.

Por eso decidí ponerme a buscar los datos de las exportaciones totales de bienes y servicios de la economía mundial. Y lo que he encontrado me ha enfadado y me ha alegrado a partes iguales.

La Unión Europea exporta 2,75 veces más que China en bienes y servicios a cierre de 2023; 3,16 veces más que los Estados Unidos; y 21,6 veces más que Rusia. Representamos el 51,8 % del comercio de la OCDE y el 31 % del comercio mundial.

La mala noticia es que no lo sabe nadie. Estamos rodeados por todas partes de los políticos inútiles, incompetentes, vagos y nulos.

¿Cómo es posible que la Unión Europea exportando en 2023 un total de 9,65 billones de euros en bienes y servicios y creciendo un 272 % desde que se inició el siglo, no sea capaz de pegar un puñetazo encima de la mesa, hacer valer nuestras capacidades y de verdad ponerse a liderar el mundo?

Pues, mis queridos lectores, la única razón es que estamos rodeados por todas partes de la peor casta de políticos que ha habido en la historia de la Unión Europea. Estamos rodeados de gente como Pedro Sánchez, Emmanuel Macron, Úrsula von der Leyen, Antonio Costa y el resto de los 24 primeros ministros que sumados todos no le llegan ni a la suela de los zapatos a personajes como el general de Gaulle, Conrad Adenauer, Helmut Kohl, Margaret Thatcher, que si hoy estuviesen vivos volverían a ponerse al frente de la Unión Europea y la volvería a hacer grande.

No es posible que Vladimir Putin nos tenga acojonados a todos los europeos. No puede ser que Xi Xin Ping, al que si le dejamos de comprar todo lo que nos vende tiene un agujero en sus ventas de productos difícil de resolver. No puede ser que estemos acojonados por un tipo que quiere hacer grande América, y tiene todo su derecho, pero nosotros no tengamos a nadie que quiera hacer grande a Europa.

Mires ustedes los datos que los he preparado:

China le ha comido el queso a los Estados Unidos y por eso Donald Trump no sólo está preocupado sino también acojonado, porque China en este siglo ha crecido en sus exportaciones totales en un 1.289 %, mientras Estados Unidos sólo ha crecido un 178 % y la culpa no es de China, es de Estados Unidos. La Unión Europea ha crecido un 272 % y Alemania, que se está paralizando con sus políticas verdes, ha crecido un 236 %. Eso sí Reino Unido, la pérfida Albión, sigue el mismo camino de los Estados Unidos, se olvidó de Churchill y de Thatcher, con una diferencia, gestionado por un infiltrado en el laborismo que es un islamista. Este Reino Unido, viejo y agotado de ideas, sólo ha sido capaz de crecer un 150 % en lo que va de siglo.

Y de Francia que podemos decir, que su grandeur se la han comido los burros, porque debía de ser verde.

Nos meten miedo con la India y razones hay, pero todavía exporta menos que Singapur, a la que hay que mirar con admiración, y está ligeramente por encima de Italia, que al menos tiene en estos momentos a la única persona de la UE que tiene la cabeza encima de los hombros y le sirve para pensar.

La Unión Europea tiene problemas: se llaman Úrsula von der Leyen, Antonio Costa, Pedro Sánchez, Olaf Scholz, Emmanuel Macron y aquí incluyo a Víctor Orban, que sólo se mira su ombligo, se ha vendido a Trump y no es capaz de pensar en la Unión Europea.

Debemos empezar a optimizar nuestro gasto público, que nos puede dar más de 1.000.000 millones de ahorro para invertir en una industria militar

La UE debe tener su propio protagonismo, tiene derecho a ello y, además, tiene poder económico suficiente para ello. Debemos empezar a optimizar nuestro gasto público, que nos puede dar más de 1.000.000 millones de ahorro para invertir en una industria militar y en desarrollar el resto de industrias claves como la Inteligencia artificial, no como motor de desarrollo para competir con ChatGPT, sino utilizarlo para desarrollar productos de software que nos hagan mucho más competitivos que los demás en medicina, en educación, en salud, en desarrollo industrial y en cualquiera de las otras industrias que pensemos que deben ser nuestra palanca de crecimiento.

Si en España podemos optimizar más de 100.000 millones en gasto público, que no sirve para nada, en la Unión Europea podemos seguro optimizar 1 billón de euros.

Escojamos a nuevos políticos que nos lideren, optimicemos el gasto inútil, reduzcamos los impuestos, hagamos crecer nuestra economía invirtiendo 800.000 millones en desarrollarnos y nombremos a Mario Draghi presidente de la Comisión Europea y digámosles a los chinos y a los Estados Unidos que existimos y no solo que no nos van a cocinar, sino que a lo mejor les cocinamos nosotros.

Pero hay que hacerlo ya y pegando un puñetazo encima de la mesa, no negociando banalidades en París con el tonto francés que hay en el Elíseo.