Sebastián Kurz, el canciller de Austria, da plantón a Casado

Primero la política nacional y luego, la internacional. Esta es la máxima que, también en Austria, ha terminado por imponerse. Debido a las negociaciones en las que está enfrascada su formación política para sacar adelante los presupuestos del país centroeuropeo, Sebastián Kurz, canciller el Austria, ha comunicado a Pablo Casado, vía llamada telefónica, que este domingo se ve obligado a quedarse en Viena. El compromiso para sacar adelante los pactos de Gobierno obliga a Kurz a permanecer al frente de las negociaciones.

«Casado y Kurz son amigos personales desde hace años. Por eso iba a venir a Valencia, y con la misma confianza se ha visto obligado a decirle a Pablo que finalmente, sintiéndolo mucho, no podrá venir. Los ritmos de la política son así», señalan fuentes de Génova para este diario. Estos mismos interlocutores aseguran que Kurz estaba sinceramente dolido por «tener que bajarse del carro» con tan poca antelación, pero, debido a las actuales negociaciones presupuestarias en Austria, «ha visto que no le era físicamente posible estar con nosotros en Valencia».

A cambio, Kurz le enviará un video de apoyo al acto de clausura de la convención. Así ha querido agradecer Kurz la invitación a Casado. El video se retransmitirá durante el mismo acto de clausura.

El presidente del PP cierra este domingo la convención nacional de su partido en la plaza de toros de Valencia, donde pretende hacer una exhibición de fuerza, con más de 9.000 asistentes. Será la escenificación, de forma física, de su estrategia. «Queremos visualizar que la única alternativa viable a Pedro Sánchez es unir al centroderecha bajo las siglas del PP. Todo parece indicar que esta será la imagen del día de hoy», valoran fuentes de Génova.