«Cóndor», una patrullera de Aduanas a la caza de «narcoveleros» y «narcolanchas»

«El jefe de Aduanas en Galicia advierte de un repunte del narcotráfico por vía marítima desde el año 2017». «Suben a 22,1 las toneladas de hachís del pesquero interceptado en Fuerteventura, la segunda mayor aprehensión en 20 años». «Cinco detenidos tras intervenir unas 15 toneladas de hachís en un barco a 100 millas de la costa». Son solo algunos de las decenas de titulares similares que se han publicado en los últimos meses. Las organizaciones criminales han multiplicado sus operaciones de droga en España y buscan nuevas vías de entrada...

... Y nuevos métodos para lograr sus propósitos. Durante el mes de diciembre, por ejemplo, se ha juzgado el caso del «narcosubmarino» hundido en la ría de Aldán, en Cangas (Pontevedra). Sus tripulantes actuaron al servicio de una estructura criminal internacional que tenía por finalidad llevar un cargamento de cocaína desde Brasil a España, a bordo de un artefacto semisumergible. El pasado mes de octubre fueron interceptados en aguas del Atlántico dos «narcoveleros» con 5.200 y 2.000 kilos de cocaína. Y las «narcolanchas» están a la orden del día, especialmente en la costa andaluza. A finales del pasado mes de noviembre, el Tribunal Supremo confirmó una sentencia que aplica, por vez, el real decreto que prohíbe y castiga penalmente como delito de contrabando el uso de las veloces lanchas que utilizan los narcotraficantes, las llamadas «narcolanchas».

En este contexto, la Agencia Tributaria adquirió el pasado mes de abril una patrullera bautizada con el nombre de «Cóndor» a la compañía Rodman, con un coste superior a los ocho millones de euros.

Según afirma Rodman, la compañía que ha construido la patrullera, tiene 43 metros de eslora y una autonomía de 2.000 millas a 16 nudos. «Es una embarcación adecuada para la represión de actividades ilegales en alta mar, interceptación y vigilancia que permitan asegurar el cumplimiento de las leyes nacionales e internacionales». Tiene capacidad para una tripulación formada por 14 personas y otros diez pasajeros.

Recientemente han trascendido denuncias anónimas de trabajadores de aduanas criticando el funcionamiento de la patrullera, al que calificaron de «coctelera» o «colchoneta de playa», según informó eldiario.es.