Multan con 720 euros a los internautas que desearon la muerte de Adrián, el niño con cáncer que quería ser torero

La Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a los tres internautas que en 2016 escribieron en sus respectivos perfiles de redes sociales mensajes ofensivos deseándole la muerte a Adrián, el niño de siete años enfermo de cáncer terminal que de mayor quería ser torero.

Los hechos se produjeron en 2016, cuando en la plaza de toros de Valencia se celebró un festival benéfico para recaudar fondos para la Fundación de Oncohematología Infantil del Hospital Niño Jesús de Madrid. Al término de este festival, el pequeño Adrián salió del coso aupado a hombros por los propios diestros que habían participado, sus ídolos. Figuras como Enrique Ponce, Román Collado o El Soro hicieron cumplir una de las ilusiones que tenía el niño, que terminó falleciendo a los ocho años, en abril de 2017.

Una vez la imagen de Adrián se viralizó en las redes sociales, no tardaron en llegar mensajes deseándole un fatal desenlace al chico, por lo que tres de ellos han sido condenados, según aprecia la Audiencia Provincial de Valencia, por delitos contra la integridad moral .

Uno de ellos, escrito por Manuel O. C. en Twitter decía: «Qué gasto más innecesario se está haciendo con la recuperación de Adrián, el niño este que tiene cáncer, quiere ser torero y cortar orejas». «No lo digo por su vida, que me importa dos cojones, lo digo porque probablemente ese ser esté siendo tratado en la sanidad pública, con mi dinero». «Pero bueno, chic@s, esto es la misma mierda de siempre, no merece la pena ni hablar, escribir… Sólo un Gobierno futuro solucionará esto».

La segunda persona acusada, Aizpea E. O., escribió lo propio en su perfil de la red Facebook: «¿Qué opino? Yo no voy a ser políticamente correcta. Que se muera, que se muera ya. Un niño enfermo que quiere curarse para matar a herbívoros inocentes y sanos que también quieren vivir. Anda yaaaaa! Adrián, vas a morir».

Absueltos dos veces y repetición del juicio

Asimismo, el tercero de los condenados, Brayan S. L., publicó en la misma línea: «Patético es que defendáis a un niño que prefiere matar a un animal, ojalá el Adrián mate a vuestra madre y se muera».

Cada uno de ellos han sido condenados, estimando así los recursos de la Fiscalía y de la Fundación Toro de Lidia – en representación del progenitor- a abonar al padre de Adrián 720 euros (seis al día durante 120). Además, también tendrán que hacer frente a las costas procesales y a abonarle tres mil euros en concepto de daños morales y perjuicios.

A pesar del contenido explícito de los mensajes, los tres fueron absueltos hasta en dos ocasiones. En una primera vez, llegaron a estar procesados, pero resultaron absueltos tras el juicio. Esta sentencia fue recurrida por la Fiscalía, que consiguió que se repitiera la vista. Sin embargo, el resultado fue el mismo y volvieron a ser considerados inocentes.

De este modo, el fallo de la Audiencia Provincial de Valencia llega tras haber aceptado en apelación los recursos del padre y la Fiscalía.