Sumar descarta dimisiones y se limita a pedir disculpas y anunciar medidas estéticas

Cuarenta y ocho horas después de que estallara el caso Errejón, tras su dimisión y la oleada de denuncias de mujeres anónimas y conocidas por violencia machista, parte de la dirección nacional de Sumar –sin Yolanda Díaz, que se encuentra de viaje en Colombia– ha comparecido en Madrid en una rueda de prensa en la que se han limitado a pedir disculpas y lamentar que sus «mecanismos de prevención y detección» de estos casos «han fallado».

El portavoz de la coalición, Ernest Urtasun, ha señalado que sus primeras palabras son para dar «un mensaje muy claro de apoyo a todas aquellas mujeres que han sufrido acoso y violencia sexual por parte de Errejón», y ha indicado que se ponen a disposición de todas ellas para ofrecerles su apoyo «en todas las decisiones que decidan tomar», como también, según ha dicho más tarde, a disposición de organismos públicos o instancias judiciales que requieran de su colaboración.

«Todas y cada una de las informaciones que se están conociendo a lo largo de esta semana, incluida la primera denuncia, son devastadoras para la sociedad, para nosotros, para todo el mundo, y evidencian que los mecanismos de prevención y detección de nuestra organización han fallado», ha señalado Urtasun. «Tenemos la obligación de asumir nuestra responsabilidad y hacernos cargo», ha añadido, para después anunciar que la Ejecutiva del partido llevará a cabo «las actuaciones necesarias para evitar que situaciones como estas vuelvan a suceder». Pero no habrá ninguna dimisión.

La secretaria de Feminismos de Sumar, Amanda Andrades, ha expresado que «como mujer y como feminista» empatiza con el dolor de las víctimas, y ha reiterado que «han fallado los mecanismos de detección y prevención», trasladando que han puesto en marcha las actuaciones «para garantizar que estas situaciones sean abordadas de otra manera».

Así, ha explicado las cuatro medidas que tomarán para evitar que vuelva a suceder: continuar con el procedimiento interno «para esclarecer cualquier hecho contrario a los valores feministas» de Sumar; «establecer mecanismos de reparación, apoyo y acompañamiento» a quienes se han visto afectadas; poner en marcha los protocolos de prevención y abordaje de situaciones de acoso y agresiones sexuales y «ante los comportamientos machistas, lgtbifóbicos, racistas o discriminatorios»; y desarrollar un programa formativo sobre «violencias machistas y violencia sexual» que serán obligatorio para quienes formen parte de la dirección y coordinación de la coalición u ocupen un cargo público. «Estos acontecimientos marcan un punto de inflexión, un momento en el que la obligación de actuar más, mejor y antes es más acuciante que nunca», ha dicho Andrades.

Urtasun ha sostenido que desde que la dirección de Sumar tuvo la información de estos comportamientos ha actuado «con celeridad y con contundencia», y ha negado que tuvieran constancia de denuncias contra Errejón, pese a que Más Madrid dijo ayer en un comunicado que tuvieron conocimiento de una acusación contra él a través de las redes sociales. «Si las graves informaciones que han salido esta semana las hubiéramos sabido antes, Iñigo Errejón habría cesado mucho antes de sus cargos», ha afirmado, y en ello ha insistido varias veces ante las preguntas de los periodistas.

El portavoz de Sumar ha eludido responder a si en Más Madrid alguien más debería asumir responsabilidades, después de que ayer fuera cesada tras ser acusada de encubrir a Errejón la diputada en la Asamblea regional Loreto Arenillas, señalando esta que ella ha sido «el chivo expiatorio» y que sí puso en conocimiento de la que en ese momento era secretaria de Organización del partido esa información.

En lo que ha incidido Urtasun es en que Sumar y Más Madrid han trabajado en las últimas horas «de forma coordinada y en la misma dirección» para exigir a Errejón responsabilidades, y ha indicado que lo que este reconoció ante la dirección de la coalición fueron las informaciones que aparecieron esta semana, al tiempo que ha recalcado que desde el jueves no tienen ninguna vinculación con el exdiputado.

Ha sostenido, además, que no han tomado «una sola decisión» en las últimas horas al respecto en la que no haya participado Yolanda Díaz, y ha apuntado que fue ella la primera persona que le exigió responsabilidades a Iñigo Errejón. Así, ha informado de que el lunes la número dos del Gobierno presidirá una reunión del grupo parlamentario, si bien no ha querido adelantar quién sustituirá al portavoz ni avanzar nada respecto a los cambios en el partido tras su marcha de la política.

Fue el jueves cuando Iñigo Errejón anunció a través de una carta su salida definitiva de la política tras reconocer ante su partido, según informó la secretaria de Comunicación de Sumar, Elisabeth Duval, que tuvo «comportamientos machistas» o «hechos moralmente reprobables». El partido, tal como comunicó en una nota después de su dimisión, había iniciado una investigación interna tras las denuncias difundidas en redes sociales, y como resultado, se había procedido a tomar esa decisión. Por el momento, la de la actriz Elisa Mouliaá, presentó este mismo mismo jueves una denuncia ante la Policía, que, como ha contado El Debate, investiga al menos tres delitos sexuales.