Foto de la cúpula del PNV junto al traje de un pelotari para celebrar el acuerdo
Tribunales o abandono de la FIPV: cómo atajar la artimaña para reconocer la «nacionalidad» de la pelota vasca
La Federación Internacional de Pelota Vasca impidió la participación de la Federación Española para posibilitar que la selección vasca se pueda enfrentar a la española
Podía parecer una inocentada, puestoqque se aprobó el 28 de diciembre. Sin embargo, es real a todos los efectos. El pasado sábado, la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIPV) aprobó la incorporación de la federación vasca como entidad propia, de manera que en un futuro podría darse la circunstancia de que un partido oficial enfrente a la selección vasca de pelota contra la selección española.
Y, claro, la decisión explotó la alegría de los nacionalistas. El PNV calificó la decisión de «histórico y definitivo paso a la oficialidad» mientras que Bildu consideró que «estamos ante un paso adelante en la dirección del reconocimiento y respeto a la nacionalidad de la ciudadanía vasca».
Lo cierto es que esta decisión de la FIPV es fruto de la entrega del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al PNV para comprar el voto afirmativo a los Presupuestos de 2019 en la que contemplaban una enmienda en la Ley del Deporte aprobada en 2021 en la que establecía que «las federaciones deportivas autonómicas podrán participar directamente en el ámbito internacional, si la federación internacional correspondiente contempla su participación, en el caso de modalidades o especialidades deportivas con arraigo histórico y social en su respectiva comunidad autónoma».
Una decisión plagada de triquiñuelas
Sin embargo, tanto el presidente de la Federación Española de Pelota Vasca, Juan García Angulo, como la Asociación del Deporte Español, formada por diferentes federaciones deportivas españolas, denunciaron las triquiñuelas que se gestaron desde la presidencia de la FIPV para eliminar a la federación española de esa votación, donde tiene el mayor voto ponderado y podría haber supuesto que la medida no se aprobara.
Para empezar, García Angulo estaba penalizado por unas declaraciones que realizó contra algunos países árabes. Pero la penalización afectaba solo a la persona del presidente de la federación española, por lo que podía delegar el voto en otra persona.
Pero la Federación Internacional de Pelota Vasco no incluyó la votación en el orden del día de la reunión que mantuvo el pasado sábado en Pamplona. Sí se incluyó posteriormente una vez ya iniciada la reunión. De esta manera, el representante que acudió en nombre la federación española, el director de competiciones, Jorge López, estuvo presente, pero no tenía la delegación del voto, por lo que España se quedó sin ejercer el derecho y la «nacionalización» de la federación vasca de pelota se llevó a cabo con los votos de Argentina, Venezuela, México, Francia y Perú. Costa Rica se abstuvo y solo Chile votó en contra.
A los tribunales
Desde la Federación Española de Pelota Vasca ya se ha anunciado que se recurrirá a los tribunales para tratar de anular la decisión de la Federación Internacional de Pelota.
La presidenta de Unión del Pueblo Navarro, Cristina Ibarrola, habló este lunes por teléfono con el presidente de la Federación Española de Pelota Vasca, Juan García Angulo, con el que ha acordado «trabajar de manera coordinada para revertir la situación que se ha generado».
UPN considera que «lo sucedido responde, una vez más, a una cesión de Pedro Sánchez al PNV por motivos puramente políticos y de interés personal y partidista, para asegurarse su investidura, sin que haya una razón deportiva que lo justifique».
La formación regionalista va a solicitar además la comparecencia de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, para que explique si el Ejecutivo «está de acuerdo con la decisión adoptada por la Federación Internacional de Pelota Vasca y con la modificación de la Ley del Deporte que la ha posibilitado».
De momento, la consejera de Deporte del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola, que ocupa el cargo a petición socialista, mostró su «preocupación por la falta de garantías» de la asamblea de la federación vasca, ya que «socaba el papel de España» en las competiciones internacionales.
Además, desde el ámbito político también están surgiendo voces que sugieren que la federación española debería abandonar la Federación Internacional de Pelota Vasca, de manera que, dada la práctica de la pelota vasca que se da en España respecto al resto de países, la FIPV quedaría totalmente en la insignificancia.
