El alcalde de Pamplona recurre con dinero público una condena por ayudar a una carrera que exhibía fotos etarras
La asociación que había ganado la sentencia, Pompaelo, calcula que el coste del recurso puede ascender a 10.000 euros
El alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, de Bildu, ha decidido recurrir la sentencia del Tribunal Administrativo de Navarra (TAN) que anulaba la adjudicación de una ayuda para la 'Korrika', una carrera que en teoría promociona el euskera pero que, en realidad, se dedica a exhibir las fotos de los etarras presos por las localidades donde se desarrolla.
La sentencia dictaminaba que «el procedimiento empleado por el Ayuntamiento no era el apropiado y sorteaba las medidas legales que impiden dar dinero público a iniciativas en las que se exalta regularmente a terroristas».
El Tribunal Administrativo de Navarra es un organismo propiamente navarro fiscaliza los actos ejercidos por las diferentes administraciones navarras y tiene carácter gratuito. Sin embargo, el alcalde de Pamplona, Joseba Asirón, ha decidido recurrir la sentencia a través del Juzgado Contencioso Administrativo y «esta instancia no está disponible gratuitamente (sin abogado o procurador) para los ciudadanos, lo que significa que hacer cumplir la ley a las administraciones sólo esta al alcance de quien pueda reunir una cantidad significativa. En este caso, contando abogado, procurador y posibles costas, hablamos de casi 10.000 euros», explica la asociación Pompaelo, que son los que recurrieron la concesión de la ayuda a la 'Korrika'.
«Pocas personas pueden dedicar 10.000 euros a defender la convivencia y la legalidad en Navarra, y muy pocas asociaciones tienen ese presupuesto anual», defiende Pompaelo. Por eso, han realizado un llamamiento para reunir el dinero suficiente para poder continuar en el proceso judicial.
«Si conseguimos un fallo favorable, sentará jurisprudencia. Será mucho más difícil para los ayuntamientos abusar del dinero de todos de este modo, y tendrán claro que estos ataques a la libertad de opinión no van a pasar sin reacción. Se abrirá la posibilidad de poner coto a quienes actúan como si la ley no existiera, porque no hay nadie que vaya a los tribunales a pararles los pies», defienden.
«Si no nos personamos, habrán ganado, y habremos demostrado que el uso irregular de nuestros impuestos, y la exaltación de terroristas, no nos importa tanto como para implicarnos», concluye la asociación Pompaelo.