El presidente ejecutivo y máximo accionista de Mercadona, Juan Roig.

El presidente ejecutivo y máximo accionista de Mercadona, Juan Roig.EP

Así es Internxt, la empresa de algoritmos de encriptación postcuántica participada por Juan Roig

La iniciativa del presidente de Mercadona se basa e el código abierto, una tecnología que mejora la seguridad, permite corregir errores y añadir nuevas funciones a las ya existentes

Si al común de los mortales se le pregunta por un tal Juan Roig, la gran mayoría lo asociará a la cadena de supermercados Mercadona. Sin embargo, sus obras van mucho más allá de este sector e, incluso, del complejo Roig Aena que en cuestión de meses verá la luz y que revalorizará el barrio de La Plata de Valencia.

En este sentido, el empresario levantino sigue apostando por lo digital. En concreto, uno de sus grandes proyectos es Internxt, una plataforma digital donde, tal como se explicita en su página web, se diseñan y desarrollan «aplicaciones increíbles que respetan» la privacidad de los usuarios. Hasta la fecha, en la iniciativa ya han confiado más de un millón de usuarios y ha recibido más de 30 premios y menciones.

El principal valor que aporta Internxt es la «confianza» a través del denominado «código abierto», es decir, un software que es el código informático que se utiliza para crear proyectos y que está a libre disposición del público. Con este se puede ver el código con el que se creó el sitio web y, con los conocimientos adecuados, modificar o mejorar su seguridad, corregir errores o añadir nuevas funciones.

«La mejor experiencia posible»

Los beneficios de acogerse a esta tecnología son muchos. Uno de ellos, por ejemplo, es la transparencia, dado que con el código de Internxt, lo que se ve «es lo que hay». «Cualquiera puede ver, modificar o mejorar nuestro código para garantizar que se mantiene actualizado y seguro y que no comprometerá tus datos ni tu privacidad», apunta la compañía.

Otro ámbito que combate el código abierto es que significa que «más personas pueden inspeccionar el código para que puedan corregir los problemas o vulnerabilidades rápidamente, dejando poco o ningún tiempo para que la gente explote cualquier problema con el código». Asimismo, la colaboración que este proyecto establece es básica, ya que «una comunidad activa de desarrolladores y usuarios puede contribuir activamente a mejorar el software». Estas actualizaciones hacen que siempre utilices el software más seguro y actualizado y que tengas la mejor experiencia posible.

Cuando un usuario contrata determinado servicio se suele hacer la típica pregunta de hasta cuándo, algo que desde el primer momento la empresa de Roig deja bien claro: «El OSS sigue siendo accesible al público incluso si la empresa termina, lo que permite a la gente seguir trabajando en el código; esto garantiza la continuidad y elimina la necesidad de pagar por un nuevo servicio o la pérdida de datos», se detalla en su página web.

Todo lo anterior conlleva en una indudable «agilidad» porque el software de código abierto significa que los desarrolladores pueden resolver rápidamente los errores en lugar de esperar días, por lo que la gente puede seguir utilizando el software de forma segura y sin demora. Finalmente, la fiabilidad está garantizada como consecuencia de que «el código fuente se actualiza constantemente, puedes estar seguro de que estás utilizando la mejor versión del software».

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