Begoña Gómez rompe a llorar en la investidura de Pedro Sánchez

Pedro Sánchez era investido presidente del Gobierno por tercera vez este jueves 16 de noviembre con 179 votos a favor del PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV, BNG y Coalición Canaria. Tras un tenso debate que giraba en torno a la polémica ley de amnistía, a la que PP, Vox y UPN se han opuesto desde que se conociese la medida, el líder socialista obtenía mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados bajo la atenta mirada de su esposa, Begoña Gómez, y su madre, Magdalena Pérez-Castejón.

Ambas mujeres han sido los mayores apoyos del político durante las últimas horas. Sentadas juntas en el hemiciclo, Begoña no podía evitar las lágrimas al ver a su marido proclamado presidente del Gobierno de nuevo. Visiblemente emocionada, compartía un gesto cómplice con su suegra mientras ambas aplaudían el resultado de la votación. Y es que si algo ha demostrado la bilbaína desde la primera vez que Sánchez presentó su candidatura para ocupar La Moncloa, es que el camino era cosa de dos.

Por ello, siempre ha estado a su lado en los momentos más importantes de la trayectoria política de su marido, al cual conoció hace más de dos décadas en una fiesta de cumpleaños en Madrid. Él mismo declaró públicamente que lo suyo fue un flechazo que terminó en boda civil en 2006. De hecho, durante una entrevista que Pedro Sánchez concedió a Bertín Osborne en televisión en 2015, el socialista aseguró que si se fueron a vivir juntos al poco de empezar a salir fue porque él dio el paso de dejar el cepillo de dientes en el piso que ella tenía en la capital.

Con estudios de Marketing, Begoña se crio en León y es una apasionada del mundo del deporte y de la moda. Precisamente, en este sentido, siempre intenta acudir a los actos más relevantes del presidente del Gobierno vestida de rojo, el color corporativo de su partido. Para la investidura, apostaba de nuevo por un traje de chaqueta en este tono que suponía toda una declaración de intenciones. Y es que el matrimonio, que tiene dos hijas en común -Ainoha y Carlota-, siempre se ha mostrado de lo más unido.

En la actualidad, la esposa de Pedro Sánchez, de 48 años, codirige desde 2020 un máster de la Universidad Complutense sobre ‘Transformación Social Competitiva: ODS como estrategia’. Un cargo que estuvo compaginando hasta el año pasado con su polémico trabajo como directora del Africa Center IE, el cual comenzó en 2018 poco después de que Sánchez llegase a La Moncloa, y que dejaba finalmente para «afrontar una nueva etapa profesional».

En su papel como primera dama, siempre se ha mostrado como la mayor defensora de su marido, aunque a veces le haya pasado factura. Así lo aseguraba hace unos meses Pedro Sánchez, destacando que en los últimos años Begoña ha sufrido ataques «injustos, irreales y desproporcionados» por mantenerse a su lado. Sin embargo, ninguno de ellos la ha hecho desistir en su firme apoyo personal a la carrera política de su esposo.