¿Puede el hermano de Mohamed VI quitarle el trono a su sobrino, Moulay Hassan?

El estado de salud del Rey Mohamed VI ha hecho saltar las alarmas en más de una ocasión. La última vez que se ha dejado ver en público ha sido durante la celebración de la Laylat Al Qadr, donde quedó patente que no atraviesa un buen momento. Tal y como ha informado El Debate en anteriores ocasiones, el monarca marroquí se ha enfrentado a una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) que le provoca dificultades a la hora de respirar.

También hay que tener en cuenta que ha pasado por quirófano en distintas ocasiones y la Casa Real siempre ha mantenido al margen los detalles de las intervenciones. Se ha informado cuando todo estaba resuelto, pero no en tiempo real. Por ejemplo, en 2017 le extirparon un tumor benigno en el ojo y un año después fue operado del corazón en París.

La situación médica de Mohamed VI ha situado a su primogénito en el centro de la noticia. Teniendo en cuenta las normas reflejadas en la Constitución de Marruecos, será el Príncipe Moulay Hassan el que herede el Trono. La cuestión es que hay una parte del pueblo y de las instituciones que consideran que todavía es demasiado joven y que no tiene preparación suficiente, por eso han apostado por Moulay Rachid, hermano del Rey Mohamed. Según medios locales, las comparaciones entre unos y otros han generado un clima de tensión. La Casa Real no se ha manifestado al respecto, pues es fundamental mantener la unión de cara al pueblo.

Hay que tener en cuenta que ningún organismo oficial ha hablado de abdicación, simplemente es un tema recurrente en la prensa de Marruecos. El estado de salud de Mohamed VI está dando mucho de qué hablar y ya se han planteado distintas opciones, entre las que se encuentran la posibilidad de que Moulay Hassan empiece a asumir más responsabilidades. De esta forma no le podrán acusar por no estar preparado y tendrá oportunidad de ir conectando poco a poco con la sociedad.

La ley de Marruecos que protege al Príncipe Heredero

Las tensiones por llegar al Trono de Marruecos no son nuevas. Ya existían en la época de Hassan II, cuando las rivalidades familiares hicieron que algunos se planteasen quién iba a reinar el país. No obstante, la Constitución protege al Príncipe Moulay Hassan. En el texto dejan claro que «la corona marroquí y los derechos constitucionales son hereditarios y se transmiten de padre a hijo a los descendientes en línea directa masculina y por orden de primogenitura entre los descendientes».

La ley también permite a Mohamed VI normar «otro sucesor entre sus hijos, además del mayor», pero tiene que hacerlo en vida. Si no tuviese más descendencia sí podría elegir a otro varón para que asuma cargo y es ahí donde entraría en juego su hermano Moulay Rachid porque el elegido tendría que tener «consanguinidad colateral». No obstante, todo esto, pese a ser el deseo de algunos, no se hará realidad si la historia sigue su curso. Aunque algunos creen que Rachid está más preparado, será su sobrino el que reina Marruecos en un futuro. Lo hará con el nombre de Hassan III.

Aunque hay algunos que no terminan de apostar por él, el Príncipe heredero disfruta de una exclusiva formación que el ayudará a sustituir a su padre. Se ha formado en Ciencias Económicas y Sociales en la Facultad de Gobernanza de la Universidad Politécnica Mohamed VI. Además, siempre ha llevado una vida discreta y alejada de las polémicas, lo que ha repercutido positivamente en su reputación.