Crisis en Ucrania
Tambores de guerra entre Rusia y Ucrania pese a las llamadas a la diplomacia
EE.UU. y la OTAN no ceden ante las pretensiones de Rusia y el Kremlin advierte que no permitirán que sus propuestas se ahoguen en interminables discusiones
Los esfuerzos diplomáticos para lograr detener una guerra entre Rusia y Ucrania se han intensificados en los últimos días, sin embargo, los tambores de guerra no dejan de escucharse. Si bien es cierto que los discursos comienzan con el olivo de la paz, siempre terminan mostrando el acero de guerra.
Inicialmente Rusia presentó a Occidente sus exigencias para salvaguardar su seguridad nacional, ahora tanto Estados Unidos como la OTAN le han respondido por escrito. Como los documentos presentados a Rusia no son públicos, desconocemos si la hostilidad mostrada en la retórica se traslada a los textos, lo que sí es público es el hecho de que poco o nada se han movido las posiciones de todas las partes en este conflicto.
Estados Unidos ha dejado claro que no cambia su apoyo al derecho de Ucrania a aspirar a ser miembro de la OTAN, el tema más polémico en las relaciones con Moscú. El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, señaló la noche de este miércoles que la OTAN debe mantener las puertas abiertas a nuevos miembros como un principio básico de la organización. «Por lo tanto en este tema no hay concesiones al respeto» y «reiteramos nuestro compromiso en este principio».
Blinken: «Estamos listos para cualquier escenario»
El diplomático estadounidense advirtió que hay dos vías para resolver la crisis en Ucrania: una diplomática y otra militar. La respuesta que Estados Unidos dio por escrito a Rusia ofrece «una vía diplomática seria si Rusia lo quiere».
La respuesta de Estados Unidos busca «mejorar la seguridad de todos, incluso teniendo en cuenta las preocupaciones de Rusia, siempre que se haga de forma recíproca y de buena fe», señaló Blinken ante periodistas en Washington y agregó «ahora depende del presidente Putin… es Rusia la que debe decidir cómo resolver este asunto, nosotros estamos listos para cualquier escenario».
Stoltenberg: «Nos preparamos para lo peor»
Minutos más tarde de la rueda de prensa de Blinken, el secretario de general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Jens Stoltenberg, afirmó desde Bruselas: «La OTAN tiende nuevamente la mano a Rusia» para reducir las tensiones provocadas por el despliegue de tropas rusas en la frontera con Ucrania, pero también «está preparada para lo peor».
Stoltenberg, ha reiterado que la alianza militar está dispuesta a discutir con Rusia aspectos de seguridad, pero insiste en que no hará concesiones a sus «principios básicos» y «que sea lo que sea que acordemos, tiene que ser equilibrado y verificable».
Finalmente, Stoltenberg señaló que «nuestras fuerzas están preparándose para dar una respuesta militar rápida a Rusia si decide usar la vía militar».
Lavrov: «Moscú tomará las medidas de represalia»
Este mismo miércoles, en el Parlamento de Rusia, Serguéi Lavrov, informó a la Duma, que él y otros altos funcionarios informarían a Vladimir Putin sobre los próximos pasos después de recibir el documento estadounidense.
También aprovechó para advertir que «si Occidente continúa su curso agresivo, Moscú tomará las medidas de represalia necesarias» y sentenció que «no permitiremos que nuestras propuestas se ahoguen en interminables discusiones».
Moscú quiere garantías de que a Ucrania y Georgia nunca se les permita unirse a la OTAN y ha pedido la retirada de los militares de la organización transatlántica de Europa del Este, incluidas Rumania y Bulgaria y el regreso a los niveles de despliegue de 1997.