Una concentración en Madrid pide a Igualdad condenar la violencia contra las mujeres a manos de Hamás

Una semana después de que haya asumido el cargo una nueva ministra de Igualdad, la socialista Ana Redondo García, y transcurridos apenas días de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, tuvo lugar este miércoles en pleno centro de Madrid una manifestación contra el mutismo internacional ante las agresiones perpetradas contra mujeres a manos Hamás.

A las puertas de la sede del Ministerio de Igualdad, en el número 37 de la madrileña calle de Alcalá, decenas de personas vestidas mayoritariamente de negro, secundaron una convocatoria silenciosa para expresar su repulsa por la falta de condenas internacionales ante crímenes sexuales y de género cometidos por la organización terrorista palestina en el ataque del 7 de octubre en Israel.

«Violación es violencia», «violación no es resistencia», o «vuestro silencio es clamoroso», rezaban algunos de los carteles que portaban los y las participantes en la protesta silenciosa, junto a banderas de España e Israel.

«Es importante estar aquí para recordar lo terribles hechos ocurridos el 7 de octubre en que las mujeres fueron violadas, masacradas de una forma sanguinaria, cruel, brutal, masiva y tremenda, como no se había visto en mucho tiempo», manifestó a El Debate durante la manifestación la presidenta de la Comunidad Judía de Madrid (CJE), Estrella Bengio.

La representante de la comunidad israelita más antigua de la capital española lamentó la falta de contundencia o mención por parte de algunas autoridades gubernamentales respecto de los hechos atroces cometidos contra las mujeres en el asalto coordinado al territorio israelí el mes pasado liderado por Hamás.

En ese sentido, especificó que, «el 25 de noviembre era un día muy señalado y no ha habido ninguna mención a este hecho concreto que ha sucedido muy recientemente y parece que se ha olvidado», al tiempo que exhortó: «La violencia contra las mujeres se tiene que condenar».

Bajo el lema de «Nosotras también pedimos igualdad», la concentración fue organizada por los grupos 'Israelíes en Madrid' y 'Madres Judías por la Paz', y contó además con el apoyo de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE).

Muchos de los asistentes también iban ataviados con cintas y prendas de color naranja, simbolizando el color pelirrojo de los hermanos Bibas, Kfir, de diez meses, y Ariel, de cuatro años de edad, que junto a su madre Shiri y su padre Yarden, fueron capturados por hombres armados en el kibutz israelí de Nir Oz el 7 de octubre.

Hamás ha asegurado este miércoles que la progenitora y los menores han muerto en «un bombardeo sionista», sin ofrecer más detalles, extremo que está siendo investigado por Israel.

La israelí Larissa Drachler, residente en Madrid desde hace años, consideró «inaceptable» el hecho de que el Ministerio de Igualdad no haya condenado las atrocidades cometidas a israelíes y que desde el Ejecutivo «se siga poniendo el foco en el sufrimiento palestino sin condenar a Hamás».

Pidió a la nueva titular de esta cartera que «empiece por emitir un comunicado de condena y exprese una posición mucho más contundente, especialmente en un país como España que pone el acento en la igualdad de género». «No puede ser que cuando se trata de israelíes, de repente, ya no aplica», se quejó.

En un seminario con medios internacionales celebrado este mes, la experta en legislación sobre derechos humanos de la Universidad Hebrea de Jerusalén, Cochav Elkayam-Levy, quien ha formado una comisión civil independiente para documentar las atrocidades del ataque lamentó que los organismos internacionales estén dándole la espalda a mujeres y niñas israelíes.

Valoró como muy perjudicial para las organizaciones de la sociedad civil esa actitud, especialmente a la luz de las numerosas evidencias documentales y testimonios que están siendo recolectados sobre crímenes contra mujeres, niños y niñas. Reveló asimismo que salvo funcionarios de la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional, apenas ha habido pronunciamientos o interés al respecto, lo que según ella, cuestiona el papel moral de los organismos internacionales.

La concentración de este miércoles sigue a otra celebrada la semana pasada y convocada por las mismas agrupaciones con motivo del Día Internacional del Niño, en la que decenas de madres judías e israelíes se concentraron frente a la sede de Unicef España, en el norte de Madrid, para exigir que la situación de los menores capturados por Hamás no caiga en el olvido.