El peaje que ha levantado polémica en la ciudad de Nueva York
A partir de este domingo los conductores tendrán que pagar 9 euros para entrar en el centro de Manhattan, una iniciativa marcada con el fin de mejorar la calidad del aire
Nueva York estrena este domingo el polémico peaje de 9 dólares que los conductores deberán pagar para entrar en el centro de Manhattan y que obligará a muchos viajeros a utilizar el metro de la ciudad, que en las últimas semanas ha sido escenario de varios incidentes violentos.
El precio varía en función de diversos factores: por ejemplo, si el conductor tiene una tarjeta llamada E-Z Pass, en hora punta pagará 9 dólares y por la noche 2,25, mientras que quien no disponga de esta ficha pagará 13,50 dólares en hora punta y 3,30 dólares por la noche.
Serán cámaras de video situadas en los puentes y túneles de entrada a Manhattan las que grabarán a cada vehículo y harán llegar sus facturas al propietario por vía electrónica.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha indicado que el peaje -que se aplica desde la calle 60 hasta el extremo sur de la isla- mejorará la calidad del aire en Manhattan, aliviará sus avenidas atascadas durante varias horas al día y se utilizará para financiar a la empresa metropolitana de transportes (MTA), que gestiona el metro y los autobuses.
Pero sus argumentos no han servido para convencer a muchos vecinos de la Gran Manzana y de otros estados colindantes, que dudan de que el impuesto vaya a ser efectivo y se quejan de que tendrán que tomar con mayor frecuencia el metro.