¿Por qué los semáforos tendrán una luz más y qué significa?

El automóvil está avanzando mucho más rápido de lo que pensamos, de hecho podría decirse que estamos asistiendo a una reinvención de los coches en los últimos diez años.

Nuevas realidades como la electrificación o el coche autónomo están obligando a actualizar tanto las carreteras como las propias señales. Ahora contamos con áreas de recargas, menos de las necesarias eso sí, y con multitud de señales nuevas. Estas están intercomunicadas con los servicios de tráfico e incluso con las luces de emergencia V16 capaces de enviar un aviso al centro de control de tráfico de la DGT 3.0 en caso de accidente.

Fenómeno global

En este caso y tras un desarrollo de la Universidad de Carolina del Norte en el que se ha usado inteligencia artificial, la incorporación de un cuarto color a los semáforos sería obligada si queremos integrar a los coches autónomos dentro del entorno urbano.

Los semáforos mantendrán los colores rojo, amarillo y verde, fruto de una convención internacional, pero añadirían una posición blanca que haría el tráfico mucho más fluido.

En este caso y al estar los coches autónomos en comunicación constante entre ellos, son capaces de regular su velocidad para no coincidir en los cruces, de esta manera cuando el semáforo está en la posición blanca significa que debemos copiar lo que hacen los coches autónomos. Pues ellos ya han 'hablado' y saben que podemos pasar o que debemos frenar.

Tráfico más ágil

Ellos son capaces de autorregular el tráfico para que las paradas sean las menos posibles, de manera que se agilizará el tráfico.

Como experiencia piloto ya hay un proyecto que comunica los semáforos con los servicios de emergencia para que se encuentren con el color verde en caso de urgencia, así no pierden tiempo.

Obviamente cuando no haya coches autónomos en circulación los conductores deben respetar la señalización de colores tradicional de los semáforos, pues se encontrarán con la luz blanca apagada.